Las maratonistas, el sábado próximo, y los corredores de maratón el domingo, último día de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, dispondrán de bolsas de hielo, en lugar de las tradicionales esponjas, para combatir el calor de Sapporo, donde se disputarán ambas carreras, al igual que las pruebas de marcha. Las esponjas utilizadas habitualmente en los maratones, que los atletas exprimen sobre sus cabezas para refrescarse, están prohibidas en los dos maratones olímpicos para prevenir posibles contagios de covid-19.
El Comité Organizador ha dispuesto un total de 3.040 bolsas de hielo en nueve de los catorce puntos de avituallamiento dispuestos a lo largo del recorrido del maratón. Además de las clínicas de meta habituales para aplicar los primeros auxilios, en la zona de llegada habrá baños de hielo para que los atletas puedan reducir la temperatura corporal. El sistema, encaminado a conseguir una recuperación rápida, ya fue aplicado con éxito en septiembre de 2019 en Japón. Los dos maratones comenzarán a las 7.00 horas y tendrán más de 80 participantes en la salida. El servicio meteorológico japonés lleva quince días consecutivos registrando temperaturas por encima de los 30 grados en Sapporo, un fenómeno que no se daba desde 1924, cuando sucedió durante diecisiete días seguidos.
Los organizadores de los Juegos decidieron trasladar a Sapporo (831 kilómetros al norte) las pruebas de maratón y marcha para huir del calor y la humedad, normalmente más altos por estas fechas en la capital japonesa, aunque los últimos días los datos no han sido muy diferentes Este miércoles, a tres días del maratón femenino, Tokio registra una temperatura de 33 grados y una humedad del 58 por ciento a las 16.00 horas, mientras que, a la misma hora, en Sapporo hay 26 grados pero con un 90 por ciento de humedad.
EFE