El Alianza Lima deberá jugar el próximo año en la segunda división después de que la Federación Peruana de Fútbol (FPF) rechazó este lunes todos los reclamos que presentó para intentar impedir el descenso. Aunque el Alianza perdió en las canchas de juego su permanencia en la primera división, al ser el antepenúltimo equipo en la clasificación general de este año, sus dirigentes mantienen una persistente negativa a aceptar el descenso a la Liga 2 peruana.
Presentaron, por ese motivo, sendos reclamos para intentar que se le resten puntos al Sport Huancayo, el equipo que los venció por 2-0 el 28 de noviembre pasado en el partido que definió su descenso, y contra el Carlos Stein, que durante esa jornada empató 1-1 con el UTC y logró mantenerse en la primera división.
Sus quejas contra el Huancayo, por presuntos incumplimientos de los protocolos sanitarios ordenados por la pandemia de la covid-19, fueron denegadas hace diez días, mientras que este lunes la FPF también rechazó sus dos peticiones para que le resten puntos al Stein por un presunto retraso en el pago a sus jugadores.
Al respecto, la Gerencia de Licencias de la FPF concluyó que las denuncias y pruebas presentadas por los abogados del Alianza se refieren a hechos "ya evaluados, investigados y/o sancionados" por lo cual "deben ser rechazadas". De esa manera, la FPF confirmó que el equipo blanquiazul, que fue fundado en 1901, deberá jugar en la segunda división por segunda vez en su historia deportiva, ya que también descendió en 1938.
Sin embargo, tras conocerse la última resolución de la FPF, el abogado del Alianza, Diego Guerrero, aseguró que será impugnada, aunque consideró que ya todas las instancias han sido agotadas en el país y podrían recurrir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
"En mi posición, diría que en Perú está todo agotado y tendríamos que ir al TAS. Pero lo estamos conversando con el resto de abogados", sostuvo Guerrero en la emisora RPP Noticias. Detalló que de acudir al tribunal deportivo internacional solicitarán "una medida cautelar" para que se les permita jugar en la primera división, aunque admitió que "eso no se puede asegurar porque así son los procesos legales".
La eventual apelación ante la FPF o cualquier solicitud ante el TAS deberá definirse en el plazo máximo de una semana, ya que la gerencia deportiva del equipo tiene que establecer el presupuesto para la campaña del próximo año, concluyó el abogado.
EFE