Jimmy Butler, del Heat de Miami, envía un pase en el partido de playoffs disputado ante los Bucks de Milwaukee el martes 8 de septiembre de 2020, en Lake Buena Vista, Florida (AP/Mark J. Terrill)
Jimmy Butler y el Heat de Miami se dirigen a la final de la Conferencia del Este. Giannis Antetokounmpo sólo será espectador, tal como ocurrió en el encuentro del martes. Miami, el quinto preclasificado, concretó la sorpresa frente al equipo que lideró la NBA en la campaña regular, al imponerse 103-94 a los Bucks de Milwaukee en el quinto partido de la serie semifinal del Este.
Antetokounmpo, el Jugador Más Valioso de la campaña anterior, no pudo ayudar a su equipo en el encuentro. Lo miró desde un costado de la cancha, aquejado por un esguince del tobillo derecho. “Tenemos un profundo respeto por esa franquicia, y es desafortunado que Giannis no haya podido jugar esta noche”, manifestó el entrenador del Heat, Erik Spoelstra.
Butler y Goran Dragic anotaron 17 unidades cada uno por el Heat, que ganó la serie por 4-1 y se medirá con Boston o Toronto la próxima semana. Miami no llegaba a la final de conferencia desde 2014. Para Butler, será su primera experiencia en estas instancias. “Esto significa mucho para mí”, expresó Butler.
“Pero ésta no es mi meta, la de mis compañeros ni la de la organización. Queremos ganarlo todo. Queremos un campeonato y creo que estamos enfocados en eso. Los próximos ocho partidos serán mucho más difíciles que los ocho anteriores, lo sabemos. Pero estamos listos para esto”.
Jae Crowder anotó 16 puntos, Tyler Herro añadió 14, Bam Adebayo contabilizó 13 y Kelly Olynyk finalizó con 12 por el Heat Khris Middleton sumó 23 tantos por Milwaukee, que recibió una contribución de 15 unidades y 14 rebotes de Brook López. Donte DiVincenzo añadió 17 puntos, Wesley Matthews y Marvin Williams anotaron 11 por cabeza, mientras que Eric Bledsoe repartió nueve asistencias.
Antetokounmpo hizo lo que pudo: Alentar a sus compañeros desde el banquillo y darles alguna palmada durante las pausas. La decisión de que no jugara se tomó unos 45 minutos antes de que comenzara el encuentro. “Yo quería jugar”, aseveró el astro griego. “Ustedes saben que yo quería jugar. Mi entrenador lo sabe también, pero al final del día, la organización privilegió mi salud por encima del quinto partido”.
AP