Rory McIlroy
El número uno del golf mundial, Rory McIlroy, respaldó el plan de seguridad frente al coronavirus del circuito de la PGA estadounidense y planea competir en los tres primeros torneos cuando se reanude la temporada en junio.
"Creo que PGA tiene una política muy robusta en marcha y, si pueden ejecutarla, me siento cómodo volviendo a jugar y viajar", dijo McIlroy durante una conferencia de promoción del partido benéfico en el que participará el domingo en el club Seminole de Juno Beach (Florida).
El circuito, suspendido desde mediados de marzo por la pandemia de COVID-19, presentó el miércoles los protocolos de seguridad que aplicará para reanudar la temporada el 11 de junio en el Charles Schwab Challenge de Fort Worth (Texas) sin la presencia de espectadores. Los tests regulares de coronavirus y la toma diaria de temperatura serán parte de ese plan, diseñado en consulta con expertos médicos y autoridades locales.,
McIlroy, de 31 años, tiene previsto participar en el Charles Schwab Challenge y en los dos siguientes torneos de PGA: el Heritage (Carolina del Sur) entre el 18 y el 21 de junio y el Travelers Championship (Connecticut) entre el 25 y el 28 del mismo mes, todos ellos sin público en el campo. "Tendremos que tomar todas las precauciones posibles para poder poner de nuevo en marcha los eventos del circuito", dijo el golfista norirlandés.
"Si pueden ejecutarlo de la manera correcta, no veo ninguna razón por la que no podamos empezar el 11 de junio. Si lo hacemos, estaré listo para ir a Fort Worth". Los protocolos de PGA contemplan que los jugadores tendrán que someterse al test de coronavirus antes de viajar y otra vez al llegar al alojamiento del evento. Posteriormente habrán controles diarios de temperatura en el campo, donde tendrán que cumplir otras normas respecto al uso de mascarillas y la separación física entre personas.
"Es la nueva normalidad por ahora", dijo McIlroy. "Es como tiene que ser para mantener a todos a salvo y hacer que el circuito PGA vuelva a funcionar de nuevo". El golfista no anticipa un gran impacto en el juego por la ausencia de multitudes en los torneos.
"La atmósfera no va a ser la misma que si hubiera 50.000 personas en el campo de golf, pero no creo que de ninguna manera le quite la integridad de la competición o la calidad del golf", señaló. "Estoy ansioso por jugar de nuevo y jugaré tanto como sea necesario para darme la oportunidad de ganar torneos y mantenerme en la cima del ranking mundial", avanzó el número uno de PGA.
AFP