La lucha contra el dopaje está "muy impactada" por la crisis del nuevo coronavirus, que ha provocado el aplazamiento de los Juegos de Tokio-2020, estimó este lunes la Agencia de Control Internacional (ITA), pese a que sus programas no se han interrumpido. "La lucha contra el dopaje está evidentemente muy impactada por la situación, dado que la mayoría de las competiciones no se están disputando y que las medidas de restricción decretadas por los diferentes Estados complican la logística de los controles 'fuera de competición'", indicó a la AFP un portavoz de la ITA, que tiene su sede en Lausana (Suiza).
La agencia, que comenzó sus actividades en julio de 2018, está a cargo de los programas antidopaje de numerosas federaciones olímpicas y debía realizar también los controles durante los Juegos Olímpicos de Tokio-2020, aplazados un año por la pandemia. "Nuestros programas no han sido interrumpidos puesto que un programa antidopaje no se limita a la recogida de muestras. Sólo el volumen global de los controles ha resultado impactado a día de hoy, con muchos controles que han tenido que ser aplazados", precisó este portavoz.
Así, varias actividades relacionadas con la gestión de los programas antidopaje se mantienen, entre ellas "los planes de educación, el trabajo sobre el pasaporte biológico de los deportistas o las autorizaciones de uso (de sustancias) con fines terapéuticos".
Agencia de Control Internacional (ITA),añadió esta fuente. La decisión de posponer la cita olímpica a 2021 también va a trastocar el calendario de la mayoría de federaciones "y, por efecto cascada, nuestros programas también". Financiada por el movimiento olímpico y las federaciones, que le confían sus programas antidopaje, la ITA, "si la situación perdura", deberá "solicitar ayudas externas públicas" y "si hace falta, enviar al paro técnico a algunos de nuestros colaboradores o reducir jornadas de trabajo", concluyó este portavoz.
AFP