Cinco partidos de la Serie A italiana fueron pospuestos el sábado para tratar de contener la propagación del brote de coronavirus.
Los encuentros iban a jugarse sin aficionados, pero la liga tomó la decisión de suspenderlos como parte de “medidas urgentes para la contención y manejo” de la enfermedad COVID-19. Italia ha tenido problemas para contener el virus de rápida propagación con 888 casos registrados hasta el momento, lo que lo convierte en el país más afectado fuera de Asia. Con grupos del virus en las regiones de Lombardía y Véneto, el partido más importante que se vio afectado fue el del líder Juventus contra el Inter de Milán en Turín.
El duelo entre el primer y tercer sitio estaba programado para el domingo, pero fue reagendado para el 13 de mayo. Los otros partidos pospuestos hasta esa fecha son: Milan contra Genoa, Parma contra Spal, Udinese contra Fiorentina y Sassuolo contra Brescia.
En consecuencia, la final de la Copa Italia será demorada por una semana, para el 20 de mayo. “La emergencia ocasionada por el número de casos de coronavirus en Italia ha obligado al gobierno y a otras autoridades a tomar decisiones con poca popularidad, pero que son necesarias”, dijo Vincenzo Spadafora, ministro de deportes de Italia.
“Las decisiones que deben que tomarse en torno a los desarrollos de la información y a la asesoría de la comunidad científica, además de ser actualizadas, tienen a los ciudadanos como prioridad y tratan, lo más posible, de limitar las consecuencias para todos los ciudadanos”. Spadafora añadió que la decisión de posponer los juegos fue “unánime” por parte de las autoridades deportivas y del fútbol, quienes temen que jugar en estadios vacíos tenga “repercusiones en la imagen del país”.
Los investigadores del Hospital Sacco de Milán informaron que aislaron a cuatro pacientes con la variación italiana del COVID-19 que es diferente a la cepa identificada en la ciudad de Wuhan, China, donde estalló el brote. Señalaron que esperan que el descubrimiento conduzca a más tratamientos específicos. Para este fin de semana, se llevarán a cabo cuatro partidos de la máxima categoría de Italia.
El director general del Inter, Giuseppe Marotta, dijo que la acción de la liga “me preocupa bastante”. “Si el gabinete extiende las medidas hasta el 8 de marzo, me pregunto cómo podremos manejar ciertos partidos en la siguiente ronda, cuando tenemos equipos jugando en Europa para partidos como Atalanta-Lazio, Inter-Sassuolo o Bolonia-Juventus”, señaló.
Marotta añadió que el Inter ha convocado a una reunión de la junta directiva de emergencia o una asamblea de la liga, “debido a que hay varias cosas que discutir y el equilibrio y competitividad de la liga deben salvarse”. Dijo que el partido de la Liga Europa del Inter contra Ludogrets el jueves pasado, que se jugó en un estadio vacío, fue “una experiencia irreal que penaliza a los aficionados, pero hay una emergencia y debemos continuar con la temporada.
Sinceramente, no veo otras opciones”. En tanto, el director general del Udinese, Franco Collavino, dijo que su club “hizo todo lo posible para evitar jugar a puerta cerrada”. “Al final, se decidió por la solución más lógica y justa”, agregó. El fútbol también se ha visto afectado en otras partes de Europa, con juegos de la primera división de Suiza que fueron pospuestos luego de que se emitió una orden federal que prohibió todos los eventos que involucren a más de 1.000 personas hasta mediados de marzo.
AP