Sean Bratches, miembro del trío dirigente de la Fórmula 1 como director de operaciones comerciales, dejará sus funciones a finales de enero, aunque conservará un puesto de consejero, anunció la F1 este lunes. “Tras tres años en este puesto, Sean ha decidido regresar a los Estados Unidos para acercarse a su familia”, explicó la F1 en un comunicado. Bratches había empezado como director de operaciones comerciales a comienzos de 2017, tras la compra por parte del grupo estadounidense Liberty Media de la F1, durante mucho tiempo dirigida por el británico Bernie Ecclestone.
Junto a él, el estadounidense Chase Carey es nombrado director general y el ingeniero y antiguo dirigente de escudería británico Ross Brawn director deportivo y técnico. Bratches tenía como función transformar el deporte “en grupo comercial de clase mundial”, recuerda la F1. “Todas las cifras clave, incluido el número de espectadores, telespectadores y el compromiso en los medios digitales y sociales, han aumentado a lo largo de mandato”, añadió.
AFP