Biles será la gran sensación de la competencia / Foto: AP
El milimétrico reparto de las plazas para los Juegos Olímpicos de Tokio y el espectáculo inconmensurable de la estadounidense Simone Biles: como en las barras asimétricas, en esos dos planos paralelos pero a distinta altura se desarrollarán los campeonatos del mundo de gimnasia artística que comenzarán este viernes en Stuttgart (Alemania).
Por un lado, Biles y sus nuevas dificultades, que quedarán oficialmente bautizadas con su nombre en la cita germana y que, salvo imprevisto, le darán su quinto título mundial. Y, por otro, los casi 550 gimnastas de 92 países que competirán por las medallas universales y, sobre todo, por el pasaporte olímpico, solo disponible para 98 hombres y 98 mujeres. Estas son las claves para seguir los campeonatos del mundo de Stuttgart del 4 al 13 de octubre:
= Plaza olímpica para 9 equipos:
Nueve equipos masculinos y otros tantos femeninos obtendrán la clasificación para Tokio. China, Rusia y Japón, en hombres, y Estados Unidos, Rusia y China, en mujeres, no cuentan porque ya lograron su plaza en los Mundiales de 2018. Se tendrán en cuenta los resultados de la ronda de clasificación: viernes y sábado para ellas, domingo y lunes para ellos.
= Billetes individuales para 30 hombres y 32 mujeres:
Los gimnastas cuyos equipos no se clasifiquen -o que ni siquiera acudan a Stuttgart con equipo- pueden obtener plaza olímpica individual en dos casos: si terminan entre los 12 primeros hombres y las 20 primeras mujeres en la ronda de clasificación, sin tener en cuenta a los ya clasificados con su equipo; o si acaban entre los tres primeros, también aparte de los ya clasificados, en alguna de las finales por aparatos. Al contrario que en la clasificación por equipos, estas plazas son nominales, no para el país.
= Las Copas del Mundo y los torneos continentales, últimas opciones de clasificación individual:
El ganador de las series de la Copa del Mundo 2019-2020 en cada aparato (plaza nominal), más los tres mejores hombres y mujeres de la Copa del Mundo absoluta de 2020 (plazas por país) irán a Tokio, así como los dos mejores (H y M) aún no clasificados en los campeonatos continentales de 2020.
= Simone Biles, más allá de todo lo imaginable:
Con 20 medallas mundiales y cinco olímpicas en su historial, la estadounidense Simone Biles ha admitido que, casi 'aburrida' de tanta superioridad, lo que ahora le interesa es llevar la gimnasia a otra dimensión con los nuevos elementos que introduce en sus ejercicios. Nuevos y, sobre todo, tan difíciles que han obligado a la Federación Internacional (FIG) a ampliar el alfabeto: hasta ahora las dificultades iban de la A a la I. Con Biles se inaugurará la letra J.
Se han presentado diez nuevos elementos para su aprobación por la FIG durante estos Mundiales y tres de ellos corresponden a Biles: en paralelas, un giro de 360 grados sobre la barra; en barra de equilibrio, una salida con doble mortal atrás y dos giros y medio, ¡720 grados de rotación!; y, en suelo, su ya celebérrimo doble atrás con tres giros y medio, ¡¡1.080 grados!!, una dificultad J solo a su alcance.
"Quiero demostrarme a mí misma que puedo hacer estas dificultades bajo la presión que habrá en los Mundiales", ha dicho la estrella en Stuttgart. "Poner mi nombre a esos elementos es algo que estará ahí para siempre". En gimnasia, equivale a gloria eterna. Biles se proclamó campeona del mundo en 2013, 2014, 2015 y 2018 (2017 se lo tomó de descanso) y olímpica en 2016. Ninguna mujer tiene tantos títulos mundiales como ella. Si gana en Stuttgart cuatro medallas -nadie lo duda- superará el récord de podios mundiales que posee el bielorruso Vitaly Scherbo con 23 entre 1991 y 1996.
= Artur Dalaloyan, en defensa de la escuela rusa:
En los Mundiales de 2018 obtuvo cinco medallas: el oro individual absoluto y en suelo, plata por equipos y en salto y bronce en paralelas. El equipo perdió el oro ante China por solo 0,1 puntos y ahora quiere revertir la situación y lograr el primer oro de la historia para la selección rusa. Dalaloyan defenderá el título en ausencia del gran dominador de la década, Kohei Uchimura, seis veces campeón mundial, que no ha sido seleccionado por Japón tras un periodo de lesiones.
= Los medallistas panamericanos, preparados para el reto:
Con la clasificación por equipos solo al alcance de Brasil, la gimnasia latinoamericana llega a Stuttgart con más opciones que nunca de enviar a Tokio a representantes individuales. Entre los medallistas en los recientes Juegos Panamericanos de Lima, el chileno Tomás González en suelo, el dominicano Audrys Nin y el guatemalteco Jorge Vega en salto y los mexicanos Fabián de Luna en anillas e Isaac Núñez en paralelas saldrán a abrirse hueco entre los grandes especialistas europeos y asiáticos.
Los concursos femeninos fueron dominados en Lima por Estados Unidos y Canadá. Pero allí no estuvo la mexicana Alexa Moreno, primera medallista mundial de su país con su bronce en salto en 2018 y que regresa al escenario principal. Participan Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Panamá, Perú, Puerto Rico y Venezuela con hombres y mujeres y Bolivia solo con mujeres.
= Como siempre, Chusovitina:
La uzbeka Oksana Chusovitina, que debutó en campeonatos del mundo en 1991 con la Unión Soviética, sigue fiel a la cita. Volverá a disputar un Mundial, el decimoséptimo en su cuenta, a los 44 años y con ganas de acudir a sus octavos Juegos Olímpicos. El salto es una vez más su gran apuesta.
= Los jueces, con más ayuda que nunca:
Un nuevo sistema que emplea la inteligencia artificial y sensores 3D para captar cada movimiento de los gimnastas y traducirlo a datos numéricos ayudará a los jueces a revisar los ejercicios en cuatro aparatos: caballo con arcos, anillas y salto en hombres y mujeres. El método, ya probado en Copa del Mundo y los mundiales júnior, se suma a la video repetición instantánea que ya emplean los jueces desde 2005.
EFE