Tony Gonzalez, de los Chiefs de Kansas City (AP / CHARLIE RIEDEL/ARCHIVO)
En un extremo de la sala se sentó Tony González. Hasta el otro lado estaba Ed Reed. En su época como jugadores, algunas veces eso era lo más cerca que los dos nuevos miembros del Salón de la Fama querían estar. Lo mismo era para Champ Bailey y Ty Law cuando se trataba de cubrir a González, el tight end con la capacidad de cambiar un juego y un duelo de pesadilla para los defensive backs. Todos ellos son parte de la generación 2019 que ingresará al Salón de la Fama el sábado por la noche.
El viernes, hablaron unos respecto a los otros y el honor de llegar juntos al recinto del fútbol americano profesional. “Era una molestia lidiar con Tony”, dijo Reed, cinco veces All-Pro para Baltimore, un safety con instinto para cazar el balón y miembro del Equipo de la Década de 2000 de la NFL, lo mismo que González, Bailey y Law. “Tony era rudo. Uno necesitaba la ayuda de alguien más. Yo le decía a Terrell Suggs, ‘Tienes que golpearlo antes de ir a penetrar la línea de golpeo’
AP