El Gran Maestro Internacional cubano Leinier Domínguez pactó tablas este sábado con Hikaru Nakamura, con quien comparte la cima del Campeonato Nacional de Ajedrez de Estados Unidos. Domínguez (2,739 ELO), con negras, jugó de la manera sólida y precisa con que lo ha venido haciendo a lo largo del torneo, y mantuvo en todo momento bajo control el duelo ante Nakamura (2,746 ELO), al que no le quedó más remedio que ofrecer tablas al cubano.
Al dividir el punto, ambos han quedado abrazados en la cima de la tabla de posiciones, con siete unidades cada uno, de 10 posibles. A ellos, también con siete puntos, se ha sumado el subcampeón mundial, Fabiano Caruana (2,828 ELO), quien derrotó con blancas a Aleksandr Lenderman.
De cara a la última ronda, a disputarse mañana, Domínguez parte con una ligera ventaja frente a sus rivales. De los tres, será el único que juegue con blancas, y se enfrentará a Timur Gareyev (2,557 ELO), quien con negras solo ha conseguido medio punto de cuatro posibles. Hikaru Nakamura y Fabiano Caruana, ambos con negras, deberán enfrentarse a Jeffery Xiong (2,663 ELO) y Samuel Shankland (2,731 ELO) respectivamente, ambos rivales más complicados que Gareyev.
De sostener este ritmo, Domínguez podría titularse como campeón de Estados Unidos, con lo cual sellaría un regreso triunfal a los trebejos después de permanecer dos años sin competir a este nivel. Las partidas se están desarrollando en el club de ajedrez del Salón de la Fama norteamericano en la ciudad de San Luis, Missouri.
Este ha sido el primer evento oficial donde Domínguez haya jugado después de estar dos años inactivo. Para ello, la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE, por sus siglas en francés) lo registró en diciembre del año pasado como miembro de la Federación de Ajedrez de Estados Unidos, donde reside desde 2017.
El ajedrecista de 35 años debió cumplir un período de inactividad de dos años en torneos FIDE (Grand Prix, Olimpiada y Copa Mundial), mínimo que exige el organismo rector de la disciplina para que un jugador pueda optar por el cambio de bandera. La última presentación del mejor ajedrecista cubano fue en la Olimpiada de Bakú, Azerbaiyán, en septiembre del 2016, cuando ganó la medalla de plata en el primer tablero.
Después de que se conociera oficialmente la entrada del güinero al equipo de EEUU, las autoridades ajedrecísticas cubanas emitieron un comunicado en el que "no aceptaron" que el Gran Maestro cambiara de federación, ni jugara por otro país, un asunto que presentó como "una cuestión de principios". La transferencia de Leinier blindó la nómina de EEUU, que ahora cuenta con Fabiano Caruana, Wesley So, Hikaru Nakamura y Samuel Shankland, todos con ELO superior a 2,700.
También supuso un duro golpe para la Federación Cubana de Ajedrez, que ha visto partir al mejor jugador de su historia reciente y se ha quedado sin figuras representativas, pues también salieron de la selección nacional los Grandes Maestros Lázaro Bruzón y Yuniesky Quesada.
DIARIO DE CUBA
