Ginóbili es el jugador con más robos y anotaciones de tres en la historia de San Antonio. Getty Images
Emanuel Ginóbili vivirá su gran noche este jueves.
Menos de un año después de anunciar su adiós, el basquetbolista argentino recibirá uno de los mayores honores del deporte profesional de Estados Unidos cuando los San Antonio Spurs retiren la camiseta con el número 20 que portó durante sus 16 temporadas con la franquicia texana. Es un ritual reservado para aquellos jugadores que han dejado una huella imborrable defendiendo unos colores, un grupo selecto que logró trascender del tabloncillo para escribir páginas gloriosas en la historia de sus equipos.
Ginóbili formó junto a Tim Duncan y Tony Parker el tridente más exitoso en la historia de la NBA, ganando cuatro títulos. El legendario argentino será el noveno basquetbolista en ser homenajeado por el equipo de San Antonio y tan solo el octavo jugador no estadounidense o canadiense en recibir la distinción, convirtiéndose en el primer latinoamericano.
Pero, ¿dónde nació esta tradición que se hizo popular en Estados Unidos y en algunos casos se ha extendido a otros países?
El consenso general es que la primera vez que se retiró un número en honor a un jugador ocurrió a comienzos de la década de los 30. El honor recayó en Ace Bailey, estrella hasta ese momento de uno de los clubes con más tradición de hockey sobre hielo, los Toronto Maple Leafs. Cuenta la historia que la carrera de Bailey terminó bruscamente cuando fue atacado por Eddie Shore durante un partido de Toronto contra los Boston Briuns el 12 de diciembre de 1933. Bailey y Shore estrecharon las manos tras el altercado que tuvieron que acabó con la carrera de la estrella de los Maple Leafs.
Shore, ofuscado por una agresión que había recibido durante el juego, reaccionó golpeando violentamente a Bailey sin percatarse que el jugador canadiense no había tenido nada que ver en el incidente. Con el duro impacto Bailey se cayó y se golpeó fuertemente la cabeza contra el hielo, sufriendo una fractura en el cráneo y graves lesiones que le impidieron volver a jugar hockey en su vida.
Conmovidos por lo que le ocurrió a uno de sus principales jugadores, la directiva de los Maple Leafs decidió organizar un partido de las estrellas benéfico para ayudar a Bailey y su familia en febrero de 1934. Fue allí cuando anunció que no volvería a asignar la camiseta número 6 que lo había identificado durante sus siete años en el equipo, con lo que comenzó una tradición que 84 años después tendrá al argentino Manu Ginóbili como protagonista.
BBC