La Juve empieza el 2019 sin cambiar sus costumbres: ganando. Los bianconeri conquistaron por duodécima vez consecutiva (enésimo récord) el pase a los cuartos de final de la Copa italiana batiendo a domicilio al Bolonia de Inzaghi, que a pesar de los estrenos de Sansone y Soriano sigue en su momento gris. Los de Allegri apenas se despeinaron para sellar su clasificación.
Sin el lesionado Mandžukic y con Dybala y Cristiano en el banquillo, Allegri apostó por Kean, que nunca había sido titular, y por Spinazzola, ya recuperado de su lesión. Bernardeschi marcó el tanto del 1-0 nada más empezar, aprovechando un regalo de los rivales Da Costa y Calabresi y a partir de ahí todo se puso muy fácil para el campeón de Italia, demasiado superior.
El intento de reacción de los rossoblú se frustró en el arranque de la reanudación, cuando el propio Kean, tras un remate de Douglas Costa, realizó su primer tanto de este curso. Faltaban 40 minutos y Allegri los aprovechó como un entrenamiento de cara a la Supercoppa: entraron Cristiano, Dybala y Alex Sandro, que serán titulares ante el Milán, para recuperar ritmo y estado de forma. Tuvieron más suerte que Szczesny, que vivió hora y media pasando frio ya que el Bolonia no remató a puerta ni una vez. En los cuartos, la Vecchia Signora espera al ganador del Cagliari-Atalanta.
Mirko Calemme AS
