Marco Rubio. (AP)
El senador republicano por la Florida Marco Rubio anunció que está "trabajando para anular" el acuerdo logrado entre las Grandes Ligas (MLB) y la Federación Cubana de Béisbol (FCB) para normalizar las contrataciones de los peloteros cubanos.
"La legalidad del reciente acuerdo entre la MLB y la Federación Cubana de Béisbol (FCB) se basa en la era de Obama que dictaminó que la federación no está controlada por el Gobierno cubano. Esto no es solo un hecho incorrecto, es una farsa y estoy trabajando para que se anule lo antes posible", escribió Rubio en su cuenta en la red social Twitter.
Según recordó el Miami Herald, en 2016 el Departamento del Tesoro de los EEUU llegó a la conclusión de que la FCB no formaba parte del Gobierno cubano. Un abogado familiarizado con las negociaciones dijo que su estado se considera similar, por ejemplo, al Comité Olímpico de los EEUU, que es independiente del Gobierno de los EEUU.
Bajo el acuerdo alcanzado, dijo el político de origen cubano, "la Federación Cubana de Béisbol, controlada por el Gobierno de Cuba obtendrá el 20% del valor total de cada contrato de MLB firmado por un jugador cubano". "El régimen impondrá un nuevo impuesto sobre la renta a los ingresos de los jugadores, a pesar de que los ingresos se ganan jugando en los EEUU", criticó Rubio, lo cual calificó de "ilegal e inmoral".
Según el pacto logrado el pasado 19 de diciembre, la MLB pagará a La Habana una "tasa de liberación" por contratar peloteros cubanos, que según la FCB se revertirán en el desarrollo del béisbol en la Isla. Lo mismo dice el Gobierno cubano en el caso de la venta de servicios profesionales médicos, un engaño desvelado en una investigación iniciada por DIARIO DE CUBA sobre la salud pública cubana.
Rubio manifestó su confianza en que el presidente de EEUU, Donald Trump, acabe con el acuerdo entre la MLB y la FCB. "Estoy muy seguro de que @Potus @StateDept va a poner fin a este terrible trato unilateral", escribió en otro tuit en un mismo hilo. El convenio logrado entre Grandes Ligas y la Federación Cubana de Béisbol se concretó luego de tres años de negociaciones. Cuenta con el consentimiento de la Asociación de Jugadores de la MLB (MLBPA) y en él entrarán todos los peloteros cubanos asociados a la FCB, que juegan en la Serie Nacional y en el resto del sistema de competencias de Cuba.
Según se dio a conocer esta semana después del anuncio del pacto, los peloteros cubanos que emigren después de la implementación del acuerdo entre la FCB y la Major League Baseball (MLB), serán vetados para firmar con cualquier equipo estadounidense. Así los jugadores que abandonen la pelota cubana por su cuenta no podrán integrar las nóminas de los equipos de la MLB hasta pasado un largo periodo de tiempo. Como había asegurado el columnista de MLB Jeff Passan, los que el Gobierno llama "desertores" sufrirían un castigo extra, pues tendrían que esperar hasta el final de la siguiente temporada de Grandes Ligas para ser tomados en consideración.
Passan indicó en su análisis que esa cláusula del acuerdo tendría una intención abiertamente punitiva, por cuanto busca castigar severamente a quienes decidan dejar Cuba e ignorar el nuevo sistema de contratación. Este tema podría resultar uno de los más polémicos del acuerdo que, según la nota de prensa de la FCB, es discutido por estos días con los jugadores en La Habana, Santa Clara y Santiago de Cuba para "abordar las características de los contratos que los jugadores nacionales firmarán con la FCB en un tiempo prudencial".
Diario de Cuba