ADRIAN BELTRE
ARLINGTON, Texas, EE.UU. — Rumbo a los meses de descanso, Adrián Beltré tenía plena certeza que había disputado el último juego de sus 21 temporadas en las Grandes Ligas.
"Solo fue que tuve que esperar un poco de lo que quería", dijo Beltré al explicar que quería estar bien seguro de no ser uno de esos peloteros que se retiran y luego se arrepienten con ganas de volver al terreno.
"Quería ver si eso me pasaba, pero no fue así". Y aunque sabe que echará de menos el béisbol, el dominicano de 39 años expresó que está "totalmente feliz" con su decisión. Beltré, integrante de los Rangers de Texas en las últimas ocho temporadas de una carrera que debe llevarle al Salón de la Fama, se despidió el viernes en una divertida rueda de prensa del estadio donde se unió al club de los 3.000 hits en 2017. Nada de lágrimas de Beltré, quien comunicó su decisión hace 10 años y respondió preguntas durante 30 minutos.
"No esperaba ponerme a llorar debido a que estoy bien feliz con lo que estoy", dijo Beltré, enfatizando que no cargaba con un pañuelo. Entre los presentes en la sala atestada, decorada con fotos y recuerdos de la trayectoria de Beltré, estaban sus ex compañeros Elvis Andrus, Michael Young, Yu Darvish, Derek Holland e Ian Kinsler. La única vez que Beltré intervino en una Serie Mundial fue en la de 2011, su primera campaña con los Rangers.
Ese equipo incluyó a Andrus, Young, Holland y Kinsler. Beltré aseguró que ese equipo fue el que más gozó durante su carrera. Su esposa Sandra y sus tres hijos se sentaron en primera fila. Adrián Jr., de 12 años, tenía su propio casillero en el camerino de los Rangers y se pasó muchas horas en los jardines bateándole pelotas hacia su padre. Su hija de 14 años está en la escuela secundaria y la más joven tiene 8 años.
"No fue fácil tomar la decisión de retirarme, porque siento que aún tengo las condiciones para seguir jugando", dijo Beltré, cuatro veces seleccionado para el Juego de Estrellas y ganador de cinco Guantes de Oro a la excelencia defensiva en la tercera base. "Imaginármelo como un día triste? No, porque estoy entusiasmado por poder acompañar a mi familia todos los días". Hace dos semanas, Beltré llamó al gerente general de los Rangers Jon Daniels para informarle que había tomado una decisión. Todo comenzó con una charla solemne, con Beltré mencionándole al ejecutivo que la decisión fue difícil de tomar.
Beltré procedió a decirle que iba a seguir jugando — para los Dodgers de Los Ángeles, el equipo con el que debutó en 1998 cuando tenía 19 años. "No sé cómo respondí, si fue con un silencio incómodo o que no supe qué decirle", recordó Daniels. Beltré, quien también militó con Seattle y Boston, empezó a reírse. "Adrián dejó una huella indeleble con los Rangers de Texas y todo el béisbol. Es uno de esos peloteros de la élite", dijo Daniels.
"Es de los que brillan dentro y fuera del terreno". Elegible para las votaciones del Salón de la Fama dentro de cinco años, Beltré cerr?? su trayectoria con un promedio al bate de .286, 477 jonrones y 1.707 impulsadas en 2.933 juegos. Sus 3.166 hits lo dejaron en el puesto número 16 de la lista histórica, la máxima cantidad por parte de un extranjero. Disputó 2.759 en la antesala, una cifra que solo es superada por Brooks Robinson, un miembro del Salón de la Fama. La única vez que Beltré ha visitado Cooperstown fue a fines de la década de los 90, invitado por los Dodgers cuando aún era un adolescente en su sistema de ligas menores. "En ese momento no tenía idea de lo especial que es ese sitio", dijo.
Por Stephen Hawkins Associated Press