Serena Williams AP
Serena Williams quedó decepcionada porque no pudo despedirse de su hija antes de dirigirse a Flushing Meadows el lunes para competir en el Abierto de Estados Unidos por primera vez en dos años. Así que luego de emplear apenas 70 minutos para vencer 6-4, 6-0 a la polaca Magda Linette bajo las luces del estadio Arthur Ashe, Williams quería redimirse.
La seis veces campeona del Abierto de Estados Unidos no compitió el año pasado por el nacimiento de su hija. La estadounidense, que cumplirá 37 años en septiembre, empezó a toda potencia. Acumuló seis aces, ganó todos sus juegos con saque y dominó 23-9 en winners.
"Estar de vuelta aquí es una gran sensación”, dijo Williams, que mejoró a 18-0 su foja en juegos de primera ronda en Flushing Meadows y a 68-1 en primeros partidos en majors. La 17ma cabeza de serie en Flushing Meadows llegó en medio de un mala racha, con derrotas en tres de sus últimos cuatro partidos, Williams podría encontrarse con una conocida rival en la tercera ronda: su hermana mayor, Venus, dos veces campeona del US Open. La 16ta cabeza de serie venció 6-3, 5-7, 6-3 Svetlana Kuznetsova, la campeona del torneo en 2004.
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