LOS ÁNGELES. Ícarus, el documental que desentraña la trama del dopaje ruso, se ha alzado con la estatuilla dorada al mejor documental en la 90º edición de los premios de La Academia 2018. Dirigida por el estadounidense Bryan Fogel, el film de 121 minutos, producido por Netflix -que logra de esta forma su primer Oscar-, profundiza en el escándalo de dopaje internacional, y busca demostrar el fracaso de los sistemas de control hasta la trama rusa de dopaje de Estado probada en el informe McLaren.
El comienzo de la investigación de Fogel parte del caso del exciclista Lance Armstrong, ganador de siete Tours de Francia entre 1999 y 2005, quien reconoció su dopaje en 2013 pese a haber pasado cientos de controles sin mancha. El cineasta decidió en 2014, tras entrevistarse con varios científicos, probar en sí mismo un plan estructurado de consumo de sustancias dopantes, con la finalidad de mejorar sus resultados en ciclismo, sin dar nunca positivo.
Su experimento le llevó a contactar con el entonces director del laboratorio antidopaje ruso, Grigori Rodchenkov, quien lo ayudaría a idear el programa de dopaje que necesitaba, y uno de los principales protagonistas del escándalo que pronto se destaparía: Rodchenkov fue el brazo ejecutor que logró hacer desaparecer el positivo de más de 1.000 atletas rusos en los Juegos Olímpicos. Lo que suponía ser un documental basado en la evolución de Fogel tras su programa de dopaje, le terminó conduciendo a encontrar una historia, en palabras del cineasta, “un millón de veces mayor de lo que hubiera podido imaginar, una historia que literalmente cambia la de todos los deportes, que cambia toda la historia olímpica”.
El director aparece en varias escenas del documental como el portavoz de Rodchenkov, que muestra documentos del científico ruso cuando éste recibe el consejo de sus abogados de no presentarse ante determinadas autoridades. Rodchenkov, tras entablar una buena amistad con Fogel, decidió en noviembre de 2015 refugiarse con él en Estados Unidos, tras sentir que su vida corría peligro al dimitir de su cargo.
“Dedicamos este premio a Gregory, nuestro intrépido denunciante que ahora vive en un gran peligro”, expresó Fogel en su discurso tras ganar el Oscar. “Esperamos que ‘Icaro’, sea una llamada de atención, sobre Rusia, sí, pero también sobre la importancia de contar la verdad. Ahora más que nunca”. sostuvo. El COI prohibió que Rusia se presentase a los Juegos Olímpicos de Invierno de PyeongChang, aunque los atletas pudieron hacerlo bajo la bandera neutral que simbolizaba a los “deportistas olímpicos de Rusia”.
EFE