Un episodio terrible ocurrió en el London Stadium mientras jugaban West Ham y Burnley y donde se vio como varios fanáticos invadieron el campo para agredir a algunos jugadores. El mal momento que viven los "Hammers" ha hecho que sus seguidores se mostraran furiosos por lo resultados y luego que el Burnley le encajará el tercer gol, derrochó la molestia de estos. La policía no supo detener a los cientos de fanáticos que se adentraron al campo y hasta los mismos jugadores tuvieron que ayudar para sacarlos.
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