MINNEAPOLIS.- Mientras los Eagles de Filadelfia, nuevos campeones de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), eran recibidos como héroes en su ciudad, la cadena de televisión NBC recibió las malas noticias de una perdida del 7,1 por ciento de audiencia. A pesar que el partido fue considerado como uno de los mejores en la historia de la NFL, el Super Bowl LII, que se disputó en el U.S. Bank Stadium de Minneapolis, que tanto alcanzó el máximo de su capacidad de espectadores, dejó un promedio de audiencia de 103,4 millones de telespectadores, de acuerdo CON la compañía Nielsen.
La audiencia fue la más baja para un Super Bowl desde la edición XLIII (Pittsburgh Steelers frente a Arizona Cardinals), disputada en el 2009, que dejó un promedio de 98,7 millones. La pérdida de audiencia en el Super Bowl es vista como el resultado final de todo lo que ha sucedido durante la temporada regular en la competición de la NFL, con las protestas permanentes de los jugadores que se arrodillaban durante el himno nacional para denuncia la injusticia racial y violencia policial. Los 103,4 millones de espectadores se colocan por detrás de los últimos ocho Super Bowls que se han disputado.
El triunfo histórico logrado por los Eagles, el primero que conseguían en sus tres visitas al Super Bowl, al final no generó el interés que se esperaba y estuvo muy lejos de los 111,3 millones de audiencia que dejó el año pasado la edición 51 que se disputó en el NRG Stadium de Houston y que ganaron los Patriots en la prórroga por 34-28 a los Falcons de Atlanta. La audiencia del Super Bowl LI fue la más vista en la historia del Super Bowl.
Los directivos de la cadena NBC, a pesar de la perdida de audiencia, consideraron que el espectáculo deportivo y musical del Super Bowl sigue siendo el de mayor interés que hay en Estados Unidos. "Con un audiencia top-10 de todos los tiempos, el Super Bowl una vez más demostró que es la propiedad más dominante y consistente en televisión", declaró Mark Lazarus, presidente de transmisiones y deportes de NBC, a través de un comunicado. "Todo el equipo de trabajo hizo una gran labor".
El duelo de la pasada noche que tenía el aliciente deportivo de ver a los Patriots buscar su sexto anillo de campeones en 16 años y a los Eagles el primero de su historia en 58 años, además de la venganza de haber perdido el segundo que jugaron, el XXXIX, en el 2005, ante el equipo de Nueva Inglaterra (24-21), no defraudó.
Precisamente, la cadena NBC recordó que en comparación con el primer duelo entre ambos equipos, el incremento de audiencia fue del 20 por ciento, después de que en el 2005, la audiencia de televisión fue de 86 millones. El área de Buffalo fue el mercado de audiencia que tuvo el porcentaje más alto de espectadores, con 56,4 por ciento, que siguieron el duelo entre los Eagles y los Patriots.
El área metropolitana de Filadelfia dejó un 56,2 por ciento de audiencia, el de Boston fue algo inferior, tercero, con un 55,9 por ciento y el local de Minneapolis-St. Paul tuvo el 54,9 por ciento.
Mientras los organizadores del Super Bowl confirmaron la asistencia de más de un millón de personas a todas las actividades que se desarrollaron durante la celebración de la semana dedicada al mayor evento deportivo del año en Estados Unidos. Además de la llegada de 125.000 visitantes a Minneapolis y St.Paul que estuvieron un promedio de cuatro noches en los hoteles con un gasto promedio de 605 dólares por día.
Los ingresos económicos que dejó el Super Bowl LII, a pesar de las malas condiciones climatológicas que se dieron en los últimos días en toda el área, estuvieron cercanos a los 400 millones de dólares. Los libros de apuestas de Las Vegas también dejaron unos ingresos récord de 158,58 millones de dólares, 20 más de los que tuvieron el año pasado para el partido del Super Bowl LI, y unas ganancias de 1,1 millón de dólares.
La fiesta ahora estará en Filadelfia, donde el próximo jueves habrá un desfile en honor de los nuevos campeones de Super Bowl, mientras en Boston, esta vez el regreso de los Patriots ha estado envuelto en la polémica con la decisión del entrenador en jefe Bill Belichick de no sacar al esquinero titular Malcolm Butler. Belichick ha defendido dejarlo fuera de la formación titular como una decisión de equipo, pero todas las críticas están en su contra y el jugador, que será agente libre, no seguirá más con los Patriots.
"No se trató de ningún castigo fue una decisión que al final me tocó tomar a mi y como siempre lo hice buscando lo mejor para el equipo", destacó Belichick. Butler, que fue el héroe que les dio el triunfo en el Super Bowl del 2015 (XLIX) cuando ganaron por 28-24 a los Seahawks de Seattle, al concluir el partido ante los Eagles dijo que con el en el campo el equipo no hubiese perdido.
EFE