El ala cerrada de los Patriotas de Nueva Inglaterra, Rob Gronkowski, regresó a los entrenamientos este sábado, sólo seis días después de sufrir una conmoción cerebral durante el partido por el título de la Conferencia Americana. Aunque Gronkowski entrenó a menor capacidad que el resto de los jugadores, no ha sido autorizado oficialmente debido al protocolo de conmoción cerebral.
Los Patriotas se preparan para el partido del Super Bowl LII, que tendrá lugar el domingo 4 de febrero contra los Águilas de Filadelfia. Para los Patriotas es importante la participación de Gronkowski, quien ha sido una pesadilla para sus rivales a lo largo de la temporada y la fase final de la NFL. La salida de Gronkowski al campo de juego depende si las autoridades médicas le dan el alta antes del próximo domingo, cuando se llevará a cabo el Super Bowl.
EFE