En alguna etapa en su desarrollo como jóvenes que aspiraban a llegar a la NHL, tuvieron que celebrar sus prácticas y partidos en las pistas de patinaje sobre hielo sin la comodidad de un techo.
El lunes por la tarde, las estrellas de los Buffalo Sabres y New York Rangers revivieron sus niñeces en medio del cuadro del Citi Field, el estadio de los Mets de Nueva York, como celebración del 10mo Winter Classic anual. A pesar de que los Sabres fueron reconocidos como la escuadra local para el encuentro matutino, más de 30 mil aficionados con camisetas azules de los Rangers llenaron cada asiento de los tres niveles de las gradas, aguantando los fuertes vientos y el frío, aunque el sol brillaba sobre el hielo al inicio del partido. El Winter Classic debutó en Buffalo en el 2008 mientras caía una nieve ligera en el estadio local de los Buffalo Bills de la NFL, pero la NHL ha mantenido una unión especial con Grandes Ligas al celebrar el evento en seis ocasiones en los estadios del béisbol.
En 2009, el icónico Wrigley Field fue anfitrión del duelo entre Chicago Blackhawks y Boston Bruins. Al año siguiente, el clásico fue recibido por Fenway Park en un encuentro entre Philadelphia Flyers y los Bruins. El Citizens Bank Park acogió la celebración del evento en el 2012 cuando los Rangers visitaron a los Flyers. Dos años después, Nationals Park fue anfitrión del choque entre los Blackhawks y Washington Capitals. Los estadios de Grandes Ligas no fueron elegidos para el evento del 2016, pero el del 2017 se llevó a cabo en Busch Stadium entre los Blackhawks y St. Louis Blues.
Por Adry Torres MLB