Zach Randolph lo tenía claro después de la victoria de Memphis Grizzlies a LA Clippers (111-107). “Tonight is gonna be a good night”, pronunció al ritmo de la canción del mismo título de The Black Eyed Peas. Este miércoles había mucho que celebrar después de que unos Grizzlies irregulares esta temporada (6-5) sumaran por primera vez dos triunfos al hilo.
Superaron a unos Clippers de récord (10-2), pero fue más por la manera en la que lo consiguieron por lo que tenían motivos para el entusiasmo. Hasta cinco jugadores de Memphis lograron dobles dígitos y fueron Mike Conley (30 puntos, ocho asistencias y cinco rebotes) y Marc Gasol (26 puntos, seis asistencias y seis rebotes) los que lideraron a su equipo en los momentos más críticos. De ellos fueron los cinco últimos puntos de su equipo, cinco unidades fundamentales para sellar el juego.
El internacional español anotó un triple desde la esquina a falta de 14 segundos para el final que colocó una ventaja de dos puntos y su compañero puso punto y final con dos tiros libres acertados.
“Esto es básquetbol, es un juego de rachas. Tienes ventaja, ellos logran una buena racha, y es lo que pasa. Lo que importa es la manera en la que reaccionas contra esos equipos. Hicimos buenas jugadas y fuimos afortunados cuando la pelota entró”, aseguró Gasol, quien firmó un balance de 4-de-5 desde el arco. Memphis controló un encuentro que llegaron a ir venciendo por una diferencia de 16 puntos, un margen que dejaron escapar con el público en contra y con un J.J. Redick enchufado desde el perímetro que anotó siete triples de sus 29 puntos finales.
Entre él, Blake Griffin (25 puntos y ocho rebotes) y Jamal Crawford (15 puntos) comandaron un ataque que avivó las esperanzas de los locales pero que no fue suficiente. “Tan solo necesitamos ejecutar nuestras jugadas mejor. Para nosotros es una buena manera de aprender, pero siempre es mejor aprender ganando”, comentó Chris Paul. Una idea que también subrayó Griffin. “Es parte del aprendizaje. Es una lección.
El habernos puesto en una posición con tal agujero en el marcador hizo que el final del partido fuera intenso en cada pequeño detalle. Te descoloca. Creo que es bueno para nosotros, queremos ganarlo todo, pero esto será positivo”, agregó el ala-pívot. Los Clippers se toparon con unos Grizzlies hambrientos y dispuestos a cortar de raíz su racha de siete juegos vencidos consecutivos. Lo hicieron neutralizando a los pupilos de Doc Rivers en la primera parte, sin embargo la bestia despertó de la mano de Redick y con una defensa en la que Chris Paul (nueve puntos, seis asistencias y cinco robos de balón) siguió tan correoso como siempre. Aunque sigue siendo el jugador que más esféricos roba por cita, ante los Grizzlies le costó mucho ejecutar ante la intensidad de sus rivales (3-de-11 en tiros de campo y 1-de-4 en triples).
“Fur una gran victoria”, afirmó Conley. “Fue un triunfo muy positivo en la carretera. Estamos construyendo sobre una victoria al comienzo de nuestra gira. Creo que los Clippers son el mejor equipo de la liga en este momento por cómo están jugando en este comienzo, por eso para nosotros es algo grande el haberles superado”, declaró el armador. Memphis se encuentra inmerso un una gira en la carretera en la que pondrán punto y final el viernes en Dallas ante los Mavericks. Comenzaron perdiendo ante Milwaukee Bucks y después vencieron a Utah Jazz en una cita en la que Gasol fue el máximo anotador con 22 puntos. La guinda al pastel por ahora fue el triunfo ante los Clippers. Los pupilos de Doc Rivers viajarán el viernes a Sacramento para medirse a los Kings.
Por Gonzalo Aguirregomezcorta | ESPN