El cetro de las 115 libras de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) regresó a manos filipinas. El filipino Jerwin Ancajas se convirtió el sábado en el nuevo campeón súpermosca de ese organismo al vencer por decisión unánime al boricua McJoe Arroyo en un combate celebrado en el Fort Bonifacio en Taguig City, de Manila, Filipinas.
Ancajas aprovechó su ventaja en alcance para mantener a distancia con su ‘jab’ de derecha al puertorriqueño desde el primer asalto, y en el noveno logró acertarle un gancho de izquierda al cuerpo con el que lastimó al puertorriqueño.
Los jueces, el filipino Gil Robiego, el puertorriqueño Carlos Colón y el japonés Takeo Harada, vieron ganar ampliamente a Ancajas con tarjetas de 118-109, 115-112, 117-110 respectivamente. Ancajas, cuya única derrota había sido a manos de su compatriota Mark Anthony Geraldo en el 2014, un púgil al que Arroyo dominó por decisión, aprovechó su estatus localista para mantener arriba su orgullo y sorprender al isleño quien de paso sufrió su primera derrota profesional.
Con el revés Arroyo vio caer su marca a 17-1 y 8KO’s, mientras que Ancajas mejoró a 25-1-1 y 16KO’s. El boricua no peleaba desde que ganó el cetro mundial ante el filipino Arthur Villanueva en julio de 2015 en El Paso, Texas. Ancajas, por su parte, venía de subir por última vez al ensogado el pasado mes de noviembre en su natal Filipinas en donde derrotó por la vía rápida a su compatriota Paul Apolinario, un púgil de récord discreto.
Por Carlos Narváez Rosario / ESPN