El equipo serbio, que fue bronce en los Juegos de Pekín 2008 y de Londres 2012, en Río superó a la que era vigente campeona, a la que dominó durante todo el partido y siempre llevó la iniciativa en el marcador (3-2, 3-1, 3-2, 2-2) con la gran aportación de Dusan Mandic, quien anotó cuatro de los once goles de los suyos. En la lucha por el bronce, Italia, que había perdido en las semifinales ante Serbia (10-8), logró la medalla y el tercer puesto en el podio al imponerse a Montenegro por 12-10, que a su vez no pudo acceder a la final al caer ante Croacia (12-8).
La selección italiana fue plata hace cuatro años en los Juegos de Londres 2012 tras perder la final ante Croacia y ahora sigue entre las mejores con su tercer puesto en Río.
EFE