BUENOS AIRES — Al emblemático Lionel Messi le alcanzó en la noche de este viernes jugar la última media hora para deslumbrar a los estadounidenses en el Soldier Field de Chicago y hacer tres tantos que derivaron en el 5-0 ante Panamá y la clasificación anticipada para los cuartos de final de la Copa América Centenario.
En la fecha inicial, Messi, todavía afectado por un golpe en la zona lumbar, había observado el triunfo sobre Chile desde el banco de suplentes, pero ante los panameños ingresó cuando casi lo único destacable en el conjunto albiceleste era el gol de Nicolás Otamendi que permitió ganar el parcial. Desde la entrada el crack rosarino cambió el cotejo y la noche, con luminosidad y tres aciertos en la red de cosecha propia, que redondeó Sergio Agüero al poner el 5-0.
Por precaución, el seleccionador Gerardo Martino no quiso ponerlo a Lio de titular ante los canaleros, pero a los 15 minutos del segundo tiempo lo mandó a la cancha en reemplazo de Augusto Fernández. Y la media hora decisiva se transformó como si fuera por arte de magia, pero ocurrió por el arte de Messi. A los físicos dirigidos por Hernán Gómez se les complicó la jornada a partir de la expulsión por irresponsabilidad de Aníbal Godoy, quien a los 30 minutos del primer período le aplicó un manotazo intencional en la cabeza a Nicolás Gaitán, pero la diferencia se hizo elocuente recién cuando La Pulga puso sus pies sobre el campo de juego.
A lo 6, Otamendi, valiéndose de un cabezazo descendente, tras un tiro libre excelente que lanzó Angel Di María desde la izquierda, dejó la sensación con ese 1-0 de que todo se facilitaba, pero la monotonía sólo desapareció cuando Messi reemplazó a Augusto Fernández. Para preocupación del elenco de la AFA, a los 39 salió lesionado Di María por una molestia en el aductor derecho y lo sustituyó Erik Lamela. Fideo tiene malos antecedentes en cuanto a lesiones musculares en este tipo de competencias, dado que se desagarró tanto en el Mundial de Brasil 2014 como en la Copa América de Chile 2015.
Ya en el segundo período, a los 3 minutos, Erik Lamela puso en marcha un ataque desde la derecha hacia la izquierda, desde ese sector Marcos Rojo la volvió a dirigir hacia el medio, la desvió con dificultad el capitán Felipe Baloy, pero la solución definitiva la aportó el arquero Jaime Penedo, casi sobre la línea de sentencia. A los 9, hubo una habilitación filtrada para Gonzalo Higuaín y el delantero del Napoli se demoró para resolver, por lo que desde atrás un adversario mandó la pelota al córner.
Sobre el cuarto de hora pareció explotar el Soldier Field porque ingresó Messi en luegar del pergaminense Fernández. Y muy pronto un rechazo de los panameños dio en la humanidad de Higuaín que presionó de modo adecuado y ese tributo fue una suerte de bienvenida para Messi, quien sin demoras, estableció el 2-0 y se hizo dueño de todo lo notable que se observó en Chicago. Messi aumentó con un tiro libre magistral a los 32 y a los 41 con otro disparo ni bien observó el objetivo. Sobre la hora Sergio Agüero sirvió el postre para el 5-0, pero el dueño de la noche era, fue y será Messi, quien dejó un página para el recuerdo y la admiración eterna de los estadounidenses.
ESPN