EL jugador que llegó a la liga de la mano de los Vikings, pick 22 de la primera ronda del draft, ha tenido una carrera llena de vaivenes, su irregularidad para mantener un buen nivel, sumado a las numerosas lesiones sufridas en las rodillas y la cadera, han terminado por acabar con la carrera de uno de los receptores más eléctricos de los últimos años. Harvin era un corredor especialista en ganar yardas gracias a sus esquivas y su velocidad. Un grandísimo retornador con 5 TD de retorno en su haber, uno de ellos en la Super Bowl que logró con los Seahawks frente a Broncos. Su comienzo en la NFL hizo pensar a muchos que estábamos ante uno de los mejores receptores de la liga. En los Vikings tuvo varias temporadas buenas, culminadas en 2011 uando logró 87 recepciones para 967 yardas, 9 TD.
Los Seahawks lograron hacerse con sus servicios en 2013 pero las lesiones no le permitieron jugar nada más que 6 partidos en dos años. Los Jets intentaron sacar lo mejor de él pero, aunque mostró detalles de la enorme calidad que atesora, no terminó de encajar. El último equipo que ha intentado reconducir su carrera fueron los Bills, pero únicamente disputó 5 partidos.
El receptor firmó un acuerdo por tres temporadas en marzo, pero tras la disputa de la Super Bowl 50, el equipo decidió rescindir los dos años de contrato para reducir el impacto del contrato de Harvin contra el cap. Harvin se embolsó 6 millones de dólares por esa operación. Percy Harvin se retira de la NFL con 27, con la sensación de haber podido dejar muchas más huella en la liga. Eso sí, su palmarés a pesar del poco tiempo jugado no está nada mal. Una Super Bowl, una participación en la Pro Bowl (2009), All-pro (2009), rookie del año 2009.
AS