MADRID — James encontró justificación para la sonrisa. Al minuto cinco marcó un golazo de tiro libre para iniciar la cascada de goles del equipo B de Zidane. Una tarde placentera para el Real Madrid, que goleó 4-0 al Eibar.
Cristiano Ronaldo contribuyó con un tanto para llegar a 30 en Liga esta campaña convirtiéndose en el primer jugador en alcanzar la treintena en seis temporadas consecutivas del torneo español. Lucas Vázquez y Jesé completaron la faena. Los suplentes de Zidane allanaron el camino a los hombres que el martes se jugarán la temporada ante el Wolfsburgo suavizando a la grada, que descargó su enfado por el fiasco de Alemania en James y Danilo, sobre todo al último, recibido con una sonora pitada cuando entró en la segunda parte para relevar a Dani Carvajal.
Del equipo estelar había tres hombres en el campo al arrancar el partido. Cristiano Ronaldo, que no descansa hasta que se asegura el Pichichi o récord en turno, Casemiro y Pepe. Salvo Ramos, sancionado, y Karim Benzema, lesionado, el resto de titulares descansaron, ya sea en la banca o en el palco. Hasta Arbeloa, que apenas había disputado un partido de Liga completo esta temporada, tuvo sus momentos de premio.
Tal el la seriedad con que Zidane está preparando el encuentro importante. En el de éste sábado, irrelevante dadas sus nulas aspiraciones ligueras, Eibar probó ser presa fácil para el conjunto merengue, que resolvió el trámite en los primeros 45 minutos.
Abrió James, dando un paso hacia la redención después de convertirse – de nuevo – en el hombre señalado por una carcajada impertinente. Cristiano, cobrador oficial, cedió el turno a un hombre que necesitaba más el gol; Pepe, con un movimiento en la barrera, de esos que vienen con los años, ayudó en el despiste. James hizo el resto con un soberbio zurdazo.
Los armeros pudieron reaccionar en los 15 minutos siguientes, que el Madrid se tomó con calma. No lo aprovecharon. Cuando quisieron volver a la vida ya era demasiado tarde. Cayeron otros tres tantos en un periodo de menos de diez minutos; como en cascada. Uno por atacante.
Primero Lucas Vázquez, el canterano que se ha convertido en el jugador número 12 de Zidane. Se la puso en cortito Cristiano dentro del área, a modo para batir al arquero con un remate suave. Un minuto después, Cristiano subió la cuenta a 3-0 en un contragolpe. Lo acompañaba en la jugada Jesé, que llegó con balón controlado al área llevándose a la defensa armera. De tanto espacio, todavía se dio el lujo de bajar el ritmo dando tiempo a que el portugués se colocara para recibir el pase y fusilar. Diez minutos después y con el récord amarrado, Cristiano devolvió el favor en otra llegada a velocidad.
Madrid atacaba con tres. Ronaldo a la izquierda, Lucas por el centro y Jesé tirado a la banda derecha. El portugués recibió un balón largo y ya dentro del área cedió para Lucas, que hábilmente la dejó pasar para que Jesé, completamente libre de marca, redondeara la goleada. Al Eibar le quedó claro que no tenía mucho más que hacer fuera de cuidarse de una humillación, que al final, solo fue posible evitar gracias a que Isco y Crisitano fallaron en las oportunidades más claras de la segunda mitad. Aplacada la afición, el Madrid se dio por servido y se dedicó a disfrutar de una placentera tarde, que para presionarse ya tendrán tiempo el martes.
Por Paola Nuñez ESPN