BARCELONA — Con los goles de Westermann, en propia puerta, Leo Messi y el doblete de Luis Suárez ante el Betis (4-0), el Barcelona alcanzó hoy la cifra de 180 goles en una año natural y ha superado, así, el récord absoluto, de 178 tantos, que el Real Madrid entrenado por Carlo Ancelotti logró en 2014.
De los 180 goles que ha sumado el Barcelona en 2015, 137 llevan la firma del tridente formado por Luis Suárez, Leo Messi y Neymar da Silva. Es decir, el 76 % de los tantos del equipo entrenado por Luis Enrique Martínez llegaron de las botas de estos tres jugadores.
En el año en el que el Barcelona ha logrado cinco de los seis títulos oficiales, el máximo goleador ha sido Messi, que con el de hoy ha anotado 48 dianas en 53 partidos, los mismos que Luis Suárez en 57 participaciones, mientras que Neymar, en tercera posición, ha anotado 41 dianas en 53 compromisos oficiales. Hasta hoy, el récord estaba en manos del Real Madrid que, liderado por Cristiano Ronaldo (56), Karim Benzema (28) y Gareth Bale, batió en 2014 los 173 que el Barcelona consiguió en 2012 con Pep Guardiola (de enero a junio) y Tito Vilanova (de agosto a diciembre). “Primero ganar, luego los records” se convino en el vestuario azulgrana en una afirmación tan cierta como alejada de la realidad; tanto en el equipo como en el entorno.
Los 178 goles que marcó el Madrid de Ancelotti ya quedaron atrás y el grupo de Luis Enrique, tras celebrar las Cinco Copas, cerró el 2015 con otra fiesta y 180 goles. El Barça que comenzó el año con un derrumbe, una demanda de divorcio, un despido y una crisis que amenazó con llevárselo todo por delante frente a la sonrisa del Real Madrid, lo cerró este miércoles de la mejor manera. No marcó Neymar, quien regaló dos asistencias, pero en poco más de media hora todo estaba sentenciado. Porque por mucho que Adán (aquel portero con quien comenzó la guerra entre Casillas y Mourinho en el Real Madrid) se convirtiera en el mejor activo de un Betis castigado con un penalti más que dudoso, el fútbol del Barcelona no da opción a casi nadie. “No ha sido penalti.
Esa es la realidad y se tiene que ser claro con las cosas” convino Roberto Fernández, secretario técnico del Barça en una afirmación que le honró, a él y al club por tal sinceridad. “No lo sé porque me da de espalda” confirmó Messi, escapando de cualquier polémica. Un partido que comenzó trabado y que abrió un error arbitral acabó con el último festival del Barça de este año inolvidable. Le costó hacerse ver porque el Betis se plantó con seriedad en el césped. Pero lo hizo.
Como es habitual. En cierta manera fue un partido similar al disputado en Yokohama ante River Plate. Un inicio en el que se le sube a las barbas el rival para que el fútbol ponga las cosas en su sitio. Y en su sitio es lo que acabó reconociendo Pepe Mel: “Es el mejor equipo del mundo”.
El mejor equipo del mundo no podía más que acabar el año con los mejores registros. Con una intensidad excepcional, unas ganas de marcar goles fuera de lo común y un hambre que ofrece las mejores perspectivas, el Barça dijo así adiós al 2015. Lo que comenzó con la hecatombe de San Sebastián se cerró con festival frente al Betis. 180 goles para dejar atrás el record del Real Madrid de Ancelotti de 178, que por su parte había superado los 175 de otro Barça: el de Guardiola. De Guardiola a Luis Enrique, con Messi al mando y el fútbol en el centro de todo. Sigue el Barça.
Por Jordi Blanco ESPN
