En el camino a su Grand Slam calendario, Serena Williams tendrá un choque difícil desde lo tenístico y emocional cuando juegue ante su hermana Venus en los cuartos de final del Abierto de tenis de Estados Unidos. Serena y Venus Williams han marcado a los últimos 15 años del tenis femenino con una rivalidad tan fuerte como increíble.
Si bien Serena domina el historial, Venus consiguió ganarle once veces, mucho más que otras rivales como Justin Henin, Kim Clijsters, Lindsay Davenport, Maria Sharapova. "Estaré jugando, para mí, contra la mejor jugadora del torneo. Eso nunca es fácil. Ella me ha vencido tantas veces, he aceptado tantas derrotas ante ella, más que contra cualquier otra", valoró Serena, que trae una racha de 31 victorias consecutivas en el US Open.
"Ella sabe cómo ganarme, conoce mis debilidades mejor que nadie", agregó la número uno del mundo, que ganó los últimos cuatro Grand Slams. "Las dos estamos preparadas, ella está jugando bien y cuando conocimos el cuadro las dos nos preparamos para el caso de que nos crucemos. No siempre pasa pero algunas veces sí. Entonces tenemos que jugar", aseguró Venus, de 35 años.
Serena está a tres partidos de hacer todavía más grande su leyenda. Luego de sus títulos en el Abierto de Australia, Roland Garros y Wimbledon necesita revalidar su trofeo en Flushing Meadows para conseguir el Grand Slam en un mismo año. Las entradas están agotadas desde antes del comienzo del torneo -algo que nunca antes pasó- y sus colegas están siguiendo sus partidos con gran atención deseando que la estadounidense logre hacer historia. La competitividad de las Williams asombra hasta al propio Novak Djokovic, quien tiene a dos hermanos menores en el circuito.
"Lo primero que viene a mi mente es cómo me sentiría jugando contra mi hermano y no pienso que eso podría ser posible, honestamente", dijo el número uno del circuito masculino. "De esa manera admiro lo que están haciendo durante todos estos años, jugar en contra en escenarios tan grandes. Obviamente se aman, pero tienen que ser muy profesionales para salir a la cancha y jugar como lo han hecho tantas veces en las finales de Grand Slams y otros partidos muy grandes", destacó el serbio.
DPA