CINCINNATI — Para el cubano Tany Pérez y su familia fue un día emotivo, cuando miles de fanáticos se reunieron fuera del Great American Ball Park para develar una estatua de bronce del miembro del Salón de la Fama. La pose que eligió el artista Tom Tsuchiya refleja el poder de Pérez, con su jonrón en el séptimo juego de la Serie Mundial de 1975 contra los Medias Rokas.
Más de una docena de ex compañeros recordaron el momento, sin embargo también destacaron su liderazgo dentro del clubhouse, su amistad y sentido del humor. Pérez dijo que el día fue muy importante por muchos motivos, incluyendo la presencia de su hermana, quien vino a Cincinnati desde Cuba para la ceremonia.
"Me alegro mucho de que ella pudo compartir conmigo lo que nunca ha podido ver, y darse cuenta de lo mucho que esta gente en Cincinnati me ama," dijo Pérez. "Este día fue maravilloso. Me siento bien de que esta gente siga hablando de la Gran Maquinaria Roja." Pérez, de 73 años de edad, ayudó a los Rojos a ganar dos títulos de Serie Mundial. Fue elegido a Salón de la Fama en el 2000.
El siete veces convocado al Juego de Estrellas (y ganador del premio al Jugador Más Valioso en el Juego de Estrellas de 1967) jugó 23 años en las Grandes Ligas, 16 con Cincinnati. Tuvo un promedio de .279 con 379 jonrones y 1,652 empujadas.
AP