Lorenzo Orellano es un chico de 16 años sin antebrazo y vio realizado su sueño de debutar en el balompie profesional de Colombia con el equipo Uniautónoma en el Clásico Barranquillero contra el Club Deportivo Junior. Orellano comentó después del partido que cuando el técnico le informó que iba a debutar, no se puso nervioso ya que Giovanni Hernández le dio un par de consejos antes de ingresar a la cancha. "Me dijo que jugara como cuando él debutó, que jugara como yo sabía jugar con los niños de mi edad y gracias a Dios todo se dio", comentó.
El jugador mencionó que la clave de su buen debut fue ganar confianza con pases de primera intención. "Cuando se debuta, lo importante es tocar de primera intención para no perder el balón y cometer errores. Así, uno va ganando confianza. Gracias a Dios hice un buen debut". Por su parte, el estratega Giovanni Hernández quedó satisfecho por el debut de su pupilo, pero reconoció que aún es un niño; sin embargo, ya probó lo que es jugar en el futbol profesional.
"Me llena de orgullo haberle podido dar la oportunidad de jugar en el futbol profesional. Sé que no es la solución porque es un niño, pero probó jugar en el futbol profesional y eso me deleita a mí por esa linda oportunidad de dársela a él y porque los muchachos lo ayudaron para que estuviera feliz en el campo".
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