DETROIT – Aun cuando al campocorto cubano de los Tigres, José Iglesias, le iba mal con el madero en los entrenamientos, el capataz Brad Ausmus se mantuvo optimista. Ahora, después de casi dos semanas de temporada regular, la fe de Ausmus ha sido recompensada. Iglesias registró promedio de .135 en la Liga de la Toronja e incluso tuvo una racha de 23 turnos al bate sin hit alguno. Pero en 11 juegos de temporada regular, batea .457 con un porcentaje de embasarse de .500.
El viernes, el oriundo de La Habana conectó un sencillo de oro para darles a los Tigres el triunfo sobre los Medias Blancas. "Estaba haciendo contacto, no ponchándose", dijo Ausmus, refiriéndose a la pretemporada de Iglesias. "Si estás haciendo contacto y estás bateando .100, está incidiendo el factor suerte. Los swings fueron buenos. Le estaba dando a la bola. Es por eso que no me preocupé". En 35 presentaciones en el plato este año, Iglesias se ha ponchado apenas una vez. Conocido mejor por su defensa, el torpedero se ha convertido como un segundo primer bate desde el noveno puesto del lineup de los Tigres. "Es bastante bueno en cuanto a hacer contacto se refiere", dijo Ausmus.
"Aunque esté abajo 0-2 en el conteo, tiene posibilidades de poner la bola en juego. Su enfoque es bien simplemente. No hay mucho movimiento en su mecánica para batear. Es muy bueno a la hora de hacer swing y encontrar un hueco". Iglesias se perdió la campaña del 2014 debido a fracturas en ambas espinillas y su salud era una prioridad en los entrenamientos. Pero hasta ahora, Iglesias ha visto acción en todos los juegos de temporada regular de Detroit y dice sentirse de maravilla. "Trato de salir y competir y hacer mi mayor esfuerzo por ayudar el equipo todos los días", dijo Iglesias. "Hasta ahora he podido jugar bien y lo más importante es que estoy saludable y eso es lo que quiero".
Por Chris Vannini / Especial para MLB.com