Rajon Rondo se encuentra listo para volver a Dallas tras perderse los últimos seis partidos antes de la pausa por el Juego de Estrellas, debido a una fractura cerca del ojo izquierdo. Amare Stoudemire está a un día de incorporarse a los Mavericks, luego que los colistas Knicks accedieron a rescindirle el contrato. Así, la transformación de los Mavs comenzará, o más bien continuará.
El equipo cambió significativamente antes de la temporada y también en diciembre. Ahora, Dallas espera que la incorporación de otro jugador que llegó a participar en el Juego de Estrellas derive en una mejoría. “Nada ocurre de la noche a la mañana en este deporte”, destacó Rondo, quien llegó a Dallas mediante un canje pactado en diciembre con Boston.
“Esto lleva algún tiempo y mucho trabajo. Hace falta un montón de práctica”. Realmente, los Mavericks no pueden tomarse mucho tiempo para encarar la lucha por los playoffs en la Conferencia del Oeste. Comenzarán la recta final de la campaña el jueves, frente a Oklahoma City, un día antes de medirse a Houston y al líder anotador de la NBA, James Harden. “Tenemos trabajo por hacer”, reconoció el entrenador Rick Carlisle el martes, luego de la primera práctica posterior al receso.
“Muchos chicos nuevos llegaron este año, luego realizamos un gran canje y ahora posiblemente haremos otra adquisición. Han sucedido muchas cosas”. La prioridad para Dallas es que sus jugadores se mantengan saludables, algo a lo que ayudaría la pausa. Rondo jugará frente al Thunder pero no ha decidido si utilizará una máscara después de recibir un rodillazo de su compañero Richard Jefferson en el rostro el 31 de enero, durante un partido frente a Orlando.
AP