Berlín. EFE.- El Wolfbsburgo suspendió este domingo su viaje a Sudáfrica, donde debía realizar su concentración de invierno, en medio de la conmoción causada por la muerte en accidente de tráfico, ayer, de su futbolista belga Junior Malanda. Fuentes del club expresaron su más profunda consternación por el trágico accidente del jugador, de 20 años, ocurrida cuando viajaba por una autopista cerca de la Puerta Westfálica (centro del país).
Para las 11.00 GMT se ha anunciado una conferencia de prensa del club, donde presumiblemente se darán a conocer más detalles de lo ocurrido y la decisión de si se posterga o suspende definitivamente el viaje a Sudáfrica. “Estamos consternados y no encontramos las palabras para expresar lo que sentimos. Todos le queríamos. Era una persona llena de vida”, dijo el manager del club, Klaus Allofs, en un comunicado. Malanda era “un excelente jugador”, que se encontraba “justo al principio de su carrera”, prosiguió el directivo, para expresar a continuación sus condolencias a sus familiares y amigos.
Las primeras investigaciones policiales apuntan a un posible exceso de velocidad como causa del accidente, según informaciones del diario “Bild”. Malanda viajaba en el asiento trasero, con otras dos personas, cuando el coche patinó sobre el asfalto, mojado por la lluvia, y fue a estrellarse contra un árbol, según la Policía.
El futbolista salió expulsado y falleció en el acto mientras que los otros dos viajeros han sido hospitalizados con heridas graves. Malanda llegó al Wolfsburgo la pasada temporada procedente del Waregem belga, había jugado diez partidos con su nuevo equipo en la liga alemana, que está interrumpida durante el parón invernal.
EFE