DETROIT — Por un momento, el infielder cubano de los Tigres, José Iglesias, se olvidó de qué año era al preguntársele sobre la oportunidad de trabajar con el coach del cuadro, el venezolano Omar Vizquel, en los Entrenamientos de Primavera.
"No veo la hora", dijo Iglesias. "Tenemos un nuevo mánager y …" El piloto Brad Ausmus tomó las riendas del equipo la campaña pasada. "Bueno, él ya no es tan nuevo. Yo soy el nuevo aquí", señaló Iglesias al corregirse. Ese es el resultado de una campaña perdida.
Mientras Ausmus llevaba a su equipo la temporada pasada y Vizquel seguía orientando a la defensa de los Felinos, Iglesias entrenaba en su hogar en Miami, recuperando la fuerza en sus piernas. La carrera de Iglesias fue pospuesta por fracturas por estrés en ambas espinillas.
Cuando arranquen los Entrenamientos de Primavera este año, el cubano podrá jugar otra vez. Pero no podrá hacerlo con el mismo ritmo que tenía antes de sufrir sus dolencias. Hasta ahora, Iglesias se encuentra bien. Recibió el visto bueno para aumentar sus actividades tras consultar con los médicos el 16 de enero. Aunque no puede entrenar al 100 por ciento, Iglesias indicó que, "estoy cerca de hacerlo". No sabe exactamente cuándo podrá correr a toda velocidad, pero sabe que lo podrá hacer antes de que inicien los entrenamientos. Eso le permitirá ser parte de todas las prácticas del club durante la primavera.
"Siempre que corro estoy casi del 75 al 80 por ciento", indicó Iglesias. "He estado corriendo, fildeando rodados, bateando, saltando y haciendo de todo, sin ningún dolor. Y ésa es mi meta, mantenerme en salud". Iglesias todavía tiene que lidiar con algo de desgaste, pero eso es de esperarse. Después de un año fuera del terreno, incluyendo varios meses sin poder apoyarse bien de sus piernas, está reforzando músculos que no usaba durante un bien tiempo.
"Recuerden, estuve lidiando con esto por todo un año y pude jugar a un alto nivel", dijo el jugador del cuadro al referirse a su primera temporada completa en Grandes Ligas con Boston y luego Detroit. "Pero trataré de superar esto. Con tal de que el hueso esté bien y no haya fracturas, aguantaré el desgaste".
Los médicos todavía no han encontrado el motivo de las molestias, agregó Iglesias. Algunos indicaron que su dieta puede ser un factor, y por eso el infielder trabajó con un nutricionista para consumir más calcio y Vitamina D.
"No importa cómo sucedió", manifestó Iglesias. "Me siento mejor físicamente y ahora sigo un plan de nutrición y me siento muy bien. Me siento mucho mejor que el año pasado".
Después de todo esto, ahora Iglesias valora más el deporte que no tuvo durante un año y hasta pudo haber perdido. Aparte de uno o dos juegos en la Serie Divisional de la Liga Americana, afirma que no vio tantos juegos de los Tigres por televisión. Pero mantuvo la comunicación con sus compañeros.
"Pude valorar más todo, porque el béisbol es lo que me encanta hacer", expresó Iglesias. "Ausentarme del terreno me ayudó a ser más paciente y me hizo amar más el juego. Nunca menosprecio lo que hago, pero fue decepcionante no poder jugar, porque me encanta jugar béisbol y estar con mis compañeros. Esta es mi familia".
Por Jason Beck / MLB.com