El jugador de football de Ohio State Kosta Karageorge, que desapareció después de enviar un mensaje de texto a sus padres sobre sus conmociones cerebrales, fue hallado muerto en un contenedor de basura tras aparentemente haberse suicidado de un disparo, informaron las autoridades.
Una mujer y su hijo que buscaban artículos en la basura encontraron el cuerpo del jugador el domingo en la tarde y contactaron a las autoridades. Kosta Karageorge fue identificado por sus tatuajes. El pasado miércoles, la madre del jugador había dicho a la Policía que su hijo sufría de conmociones cerebrales. Informó además que él le envió un mensaje de texto disculpándose y diciéndole que las conmociones cerebrales le estaban estropeando su cabeza.
El portavoz de la Policía, sargento Rich Weiner dijo que se encontró una pistola y la investigación preliminar muestra que Karageorge aparentemente se suicidó.
AP