Hoy en día, los managers suelen señalar que un bullpen de lujo es capaz de hacer que los juegos sean más cortos. Se puede argumentar que dicha percepción jamás ha sido más cierta que en el caso de los Reales del 2014. La era del bullpen especializado ha producido varios tríos formidables, de los cuales el más reciente consiste del dominicano Kelvin Herrera, Wade Davis y Greg Holland de Kansas City.
Cuando se habla de los mejores bullpens de todos los tiempos, se menciona a equipos como los Rojos de 1990, los Yankees de 1996-98 y los Astros y Dodgers del 2003.
Pero los números colectivos de Herrera, Davis y Holland no tienen precedente. Hasta se puede argumentar que dicho trío ha sido el más dominante de la historia. Davis, Herrera y Holland tuvieron efectividades por debajo de 1.50 e hicieron 71, 70 y 65 presentaciones, respectivamente, durante la temporada regular del 2014. Ningún otro equipo ha contado con dos relevistas – mucho menos tres – con promedios de carreras limpias por debajo de 1.50 y más de 60 presentaciones en una campaña.
También se trata del único trío de relevistas en la historia con efectividades por debajo de 1.50 y 50 ponches cada uno. "Los tres han sido pura dinamita todo el año", manifestó el capataz de los Reales, Ned Yost. "Y que en un equipo haya tres relevistas sensacionales como los tenemos nosotros es algo bastante especial. No muchos equipos cuentan con tres muchachos que pueden entrar y cerrar la puerta y convertir un juego de nueve innings en uno de seis".
Los Reales han aprovechado el dominio de sus relevistas en esta postemporada. El único partido en el cual un abridor de los Monarcas ha lanzado más de siete episodios ha sido el Juego 2 de la Serie Divisional de la Liga Americana ante los Angelinos, en el cual el dominicano Yordano Ventura lanzó siete innings en la victoria de Kansas City.
De hecho, Kansas City es apenas el segundo equipo en la era del Comodín que gana la Serie de Campeonato de la Liga Americana sin que uno de sus abridores haya completado seis innings en el proceso. Se trata de algo que solamente los Rangers del 2011 habían conseguido.
"Para mí, la meta es terminar el sexto inning empatados o con la ventaja para que podamos darle la bola a esos muchachos", dijo Yost. "Si tenemos la ventaja, siento que el partido terminó. Si está empatado el marcador, confío en que van a aguantar las cosas hasta que anotemos una carrera".
Por Paul Casella / MLB.com