El estadounidense Michael Phelps, el deportista olímpico más condecorado de todos los tiempos, dijo el domingo que se tomará un descanso de la natación y se someterá a un tratamiento tras su reciente arresto por manejar en estado de ebriedad. Phelps fue arrestado en la madrugada del martes cuando viajaba a 135 kilómetros por hora (km/h) en una zona cuyo máximo es de 72 km/h, cruzando las líneas dobles que prohíben adelantar dentro de un túnel de Baltimore y no pudiendo pasar más tarde el test de alcoholemia, según la policía.
"Los últimos días han sido extremadamente difíciles", comentó el ganador de 18 oros olímpicos en su cuenta de Twitter. "Voy a tomarme un descanso para acudir a un programa que me aportará la ayuda que necesito para conocerme mejor", agregó. Phelps, de 29 años, no especificó cuánto tiempo planea estar alejado de la natación. Con un historial de 22 medallas olímpicas, parecía tener en mente buscar una plaza en el equipo de Estados Unidos para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Tras un retiro de dos años, Phelps estaba regresando en los últimos meses a la competición, empezando en abril en una prueba de bajo nivel en Phoenix (Arizona). El director ejecutivo del equipo de natación estadounidense, Chuck Wielgus, dijo que la organización respalda la decisión de Phelps de centrarse en su bienestar. "Su aceptación y compromiso de recibir ayuda muestra lo seria que es su intención de aprender de esta experiencia", dijo Wielgus en un comunicado.
El nadador ya había sido acusado de manejar ebrio en Maryland en 2004, cuando tenía 19 años. Se declaró culpable a cambio de una condena de 18 meses en libertad condicional. En 2009, diarios británicos publicaron una fotografía de Phelps fumando una pipa de marihuana durante una fiesta en la Universidad de Carolina del Sur.
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