El Gobierno de Corea del Sur aseguró que sus ciudadanos tendrán prohibido portar banderas de Corea del Norte, país con el que técnicamente sigue en guerra, durante los Juegos de Asia que se celebrarán en la ciudad surcoreana de Incheon del 19 al 4 de octubre.
De este modo, la Ley Nacional de Seguridad, que data de 1948 y prohíbe a los surcoreanos exhibir banderas de Corea del Norte, se aplicará también durante el evento deportivo, según anunció el Ministerio de Unificación.
"Los ciudadanos surcoreanos tendrán prohibido tener en su poder la bandera de Corea del Norte o introducirla en los estadios", explicó el portavoz del ministerio, Lim Byeong-cheol, en declaraciones recogidas por la agencia Yonhap.
Sin embargo, explicó Lim, la enseña nacional de Corea del Norte si estará izada dentro de los estadios donde se celebren las pruebas deportivas. El anuncio llega un día después de que el comité organizador de los Juegos retirara de las calles de Incheon (al oeste de Seúl) las banderas de los 45 países participantes -incluida la de Corea del Norte- después de que grupos conservadores locales protestaran por la colocación de los estandartes del país vecino.
También se produce después de que los primeros representantes de la delegación norcoreana aterrizarán en la víspera en el Sur entre una enorme expectación.
Los 94 deportistas y funcionarios norcoreanos -de un total de 273 que participarán en el evento- volaron desde la capital norcoreana, Pyongyang, hasta el aeropuerto internacional de Incheon, una ruta aérea que rara vez se ha cubierto desde el final de la guerra que enfrentó a los dos países entre 1950 y 1953.
Los norcoreanos, ataviados con unas impolutas chaquetas blancas decoradas con la bandera nacional y un pin con las efigies de los exlíderes del régimen Kim Il-sung y Kim Jong-il, fueron recibidos por una multitud de periodistas y curiosos en la zona de llegadas del aeropuerto.
En total, Corea del Norte enviará a Incheon a 150 atletas que participarán en 14 de las 36 disciplinas de los Juegos y a 123 entrenadores, miembros de las federaciones y árbitros. Las dos Coreas siguen técnicamente en guerra, ya que el conflicto que las enfrentó en los cincuenta se cerró con un alto el fuego en vez de con un tratado de paz.
EFE
