Caroline Wozniacki avanzó a la final del Abierto de Estados Unidos cuando su oponente Peng Shuai abandonó su duelo por lesión. Wozniacki tenía ventaja de un set y un quiebre en una tarde húmeda, cuando Peng se recostó del muro detrás de la línea de fondo, sufriendo de aparentes calambres en las piernas.
La china salió de la cancha con ayuda, y después de un receso de 10 minutos intentó seguir jugando. Seis puntos después, Peng cayó de rodillas. Wozniacki caminó al otro lado de la cancha para darle una palmada, y luego Peng decidió que no podía continuar.
Wozniacki derramó algunas lágrimas cuando Peng salió de la cancha en silla de ruedas. La danesa disputará su primera final de un Grand Slam desde el US Open de 2009, que perdió ante Kim Clijsters.
AP