RIO DE JANEIRO— El Mundial ya es cosa de cuatro. Y a pesar de la defensa numantina de Costa Rica y agradables sorpresas como Colombia, las selecciones que finalmente pelearán el título son las que más o menos todos tenían en la cabeza cuando empezó el torneo hace un mes.
Argentina y Holanda se sumaron hoy sábado a Brasil y Alemania como semifinalistas en un doble duelo entre europeos y sudamericanos, tradicionales dominadores del fútbol.
Entre las cuatro suman 10 mundiales. Alemania lleva cuatro semifinales consecutivas. Y sólo Holanda no sabe lo que es ganar el campeonato, porque perdió tres finales. Entre ellas la de hace cuatro años contra España.
Para equipos como Brasil y Argentina la mayor preocupación es reponerse de las lesiones. Neymar, inmovilizado y en camilla, abandonó en helicóptero la concentración brasileña para comenzar el tratamiento de la fractura en una de sus vertebras que se produjo en el choque del viernes contra Colombia y está descartado por el resto del torneo.
Los anfitriones chocan con Alemania el martes en Belo Horizonte. La Albiceleste no va a contar con Angel Di María, el guardaespaldas más importante de Lionel Messi que sufrió una lesión muscular en el triunfo 1-0 ante Bélgica, para su duelo del miércoles ante Holanda en Sao Paulo.
Costa Rica estuvo a un paso de protagonizar la gesta del Mundial. Pero se ahogó en la orilla. La selección centroamericana estranguló a Holanda sin goles hasta el alargue. En la tanda de penales se vivió uno de los momentos más sorprendentes del torneo, por inédito. Louis van Gaal reemplazó a su portero titular Jasper Cillessen por Tim Krul, una apuesta que rindió frutos.
El guardameta tapó los remates de Bryan Ruiz y Michael Umaña, y los holandeses se impusieron 4-3 en la definición desde los 12 pasos. Holanda vuelve a las semifinales por segundo Mundial consecutivo. De las cuatro candidatas, quizá la de Van Gaal sí es una relativa sorpresa. No por la calidad de sus futbolistas, sino por las incógnitas que generaron tantos cambios en la plantilla.
Sólo siete de los 23 futbolistas en Brasil estuvieron en Sudáfrica y las novedades de Van Gaal eran jugadores jóvenes de la liga holandesa prácticamente desconocidos para el gran público. "En términos de espíritu de equipo y unión, este es el mejor grupo con el que he trabajado", señaló un feliz Van Gaal. "Creo que demostramos más que Costa Rica y merecimos ganar. No sé cuánta posesión de pelota tuvimos y cuántas veces dimos a los palos y cuántas ocasiones tuvimos, pero al final todo se resume en marcar o no". Horas antes, Argentina se deshizo de Bélgica con un tempranero gol de Gonzalo Higuaín y regresó a las semifinales de un Mundial 24 años después.
La Albiceleste, que jugó probablemente su partido más completo del torneo, llegará a su duelo mucho más descansada que Holanda. Messi está ya a dos triunfos de igualar a Diego Maradona, en esa eterna comparación que siempre ha perseguido al pequeño genio del Barcelona. "Hay que ir partido a partido, pudimos llegar a la semi, que era lo que hace mucho tiempo no se lograba", dijo Higuaín.
"Ahora hay que ir a jugarla y tratar de llegar a la final". La preocupación para el técnico Alejandro Sabella es el estado de Di María. El volante del Real Madrid, autor del gol contra Suiza en octavos de final y uno de los futbolistas más en forma del plantel, fue sustituido a los 33 minutos con molestias en su muslo derecho. "Se trata de una lesión muy costosa", declaró Sabella. "Angel tiene una molestia en la cara anterior del muslo de la pierna derecha, mañana (domingo) le van a hacer análisis y vamos a ver cómo está.
Pero Di María es vital para nosotros". Mientras Di María es duda para Argentina, la gran estrella brasileña Neymar, de 22 años, abandonó en helicóptero la concentración del anfitrión en Teresópolis, cerca de Río de Janeiro. El delantero del Barcelona fue golpeado por el defensor de Colombia Juan Camilo Zuñiga durante el encuentro de cuartos de final el viernes y el impacto le fracturó su tercera vértebra.
La lesión no requerirá cirugía, pero sí un prolongado tiempo de reposo. En un vídeo de menos de dos minutos, entre lágrimas y visiblemente emocionado, Neymar agradeció el apoyo de la afición y las muestras de cariño del país.
"El sueño no ha terminado, se ha visto interrumpido por una jugada", dijo. "Pero mis compañeros van a hacer todo para que se haga realidad mi sueño, que es ser campeón (del mundo)". La ausencia de Neymar y del capitán Thiago Silva por sanción complica mucho las opciones de Brasil ante Alemania, invitado casi obligado a las semifinales, si bien la tricampeona no gana el título desde hace 18 años.
Por Jorge Sainz / AP