INDIANAPOLIS — El propietario de los Indianapolis Colts, Jim Irsay, ha sido acusado formalmente por dos delitos derivados de su arresto del mes de marzo por conducir intoxicado.
La oficina del fiscal del condado de Hamilton ha acusado a Irsay con un cargo de conducir un vehículo mientras se encontraba intoxicado, y un cargo por conducir un vehículo bajo los efectos de una substancia controlada.
Las substancias encontradas fueron oxicodona y/o hidrococona, de acuerdo a los fiscales. Cada uno de los cargos conlleva una pena máxima de 60 días en prisión y una multa de 500 dólares. Expertos legales señalaron al Indianapolis Star que es poco probable que alguien que comete un delito por primera ocasión como Irsay reciba una pena en prisión.
La audiencia inicial está programada para el 19 de junio. Irsay fue arrestado el 16 de marzo cerca de su casa en el suburbio de Carmel, por presuntamente conducir un vehículo mientras se encontraba intoxicado. Tenía 29,000 dólares en efectivo y "varias" botellas de medicamento con receta en su vehículo al momento del arresto, informó la policía. Irsay ingresó inmediatamente a una clínica de rehabilitación tras su arresto. Su hija, Carlie Irsay-Gordon, dirigió al equipo en su ausencia.
Un comunicado a nombre de Irsay fue emitido por sus representantes, Voyles, Zahn & Paul. "Queremos agradecer a la oficina del fiscal del condado de Hamilton por su profesionalismo en su investigación acerca del Sr. Irsay y por dedicar el cuidado necesario y la atención para determinar que los hechos en este asunto no ameritaban presentar cargos por delitos graves por los medicamentos prescritos del Sr. Irsay", señaló el comunicado.
"El Sr. Irsay enfrentará los cargos restantes durante el proceso judicial". Se espera que Irsay sea sancionado por el comisionado Roger Goodell en algún momento. Goodell indicó a principios de esta semana en las reuniones de los propietarios de la NFL en Atlanta que estaba esperando recibir "información o más detalles" antes de decidir las medidas que tomaría contra Irsay.
La política de conducta personal de la NFL señala que los representantes de la liga están sometidos a un "estándar más alto" y "no es suficiente con evitar ser encontrado culpable de un cargo" en una situación legal para evitar el castigo. "La política de conducta personal de la NFL se aplica a todo el personal de la liga", indicó Greg Aiello, vicepresidente de comunicaciones de la NFL, mediante un correo electrónico. "Estamos revisando el asunto y tomaremos las medidas apropiadas de acuerdo a las políticas".
Varios jugadores, incluyendo el profundo de los Washington Redskins, Ryan Clark, y el presidente de la Asociación de Jugadores de la NFL, Eric Winston, han criticado la postura de Goodell al tratar con la situación de Irsay. Clark habló de la hipocresía de la NFL y de Goodell, refiriendo esencialmente que el castigo se aplicaría más rápido para un jugador en una situación similar.
Irsay fue dado de alta de su rehabilitación y estuvo en con los Colts durante el draft. También asistió a las reuniones de propietarios de la NFL donde participó en la candidatura de Indianapolis para recibir el Super Bowl del 2018. El juego fue otorgado a la ciudad de Minneapolis.
Por Mike Wells ESPN.com