El fútbol español está de luto. Este viernes hemos conocido la triste noticia del fallecimiento de Tito Vilanova. El ex entrenador del Futbol Club Barcelona llevaba más de tres años luchando contra un cáncer en la glándula parótida al que no le ha podido ganar la batalla.
Todas las alarmas saltaron este jueves cuando, Tito fue operado del estómago en la Clínica Quirón de Barcelona. El ex técnico del Barça pasó por el quirófano después de sufrir diferentes complicaciones gástricas. En 2013, Vilanova se vio obligado a dejar el banquillo del club blaugrana, al que llegó en 2012 en sustitución de Pep Guardiola.
A pesar de su delicado estado de salud, fue capaz de ganar y recuperar la Liga BBVA igualando el récord de 100 puntos del Real Madrid y de perpetuar el modelo que construyó previamente desde la sombra.
El de Bellcaire d'Empordà, nació el 17 de septiembre de 1968, y ya es parta de la historia del probablemente mejor equipo de la historia del FC Barcelona. Sin embargo, su gran partido contra el cáncer no ha podido ganarlo. Poco después de dejar el club blaugrana viajo hasta Nueva York para someterse a un tratamiento de dos meses.
En sus siguientes apariciones públicas se le vio bastante desmejorado y delgado, pero nadie podía pensar en el fatídico desenlace. Su ausencia se notó en el equipo, dirigido en funciones por su ayudante, Jordi Roura, pero también cogió fuerzas para dedicarle finalmente el título de Liga tras caer en Copa y 'Champions'.
Vilanova llegó al cuerpo técnico de la mano de Guardiola, a quien conoció en los años ochenta cuando ambos soñaban con llegar a lo más alto en el mundo del fútbol. Guardiola sí alcanzó las cotas más altas capitaneando al club blaugrana y llegando a la selección española, pero su amigo se tuvo que conformar con una carrera más discreta que le llevó a militar en Figueres, Celta, Badajoz, Mallorca, Lleida, Elche o Gramanet hasta su retirada hace doce años.
Cuando el de Santpedor recibió el ofrecimiento de entrenar al filial hace seis años, se acordó de su excompañero en la cantera, que ya había entrenador en las categorías inferiores del Barça, puliendo a promesas que ahora militan en el primer equipo como Leo Messi, Gerard Piqué o Cesc Fàbregas.
Entre ambos entrenadores lograron el ascenso en Tercera División del Barça B y, cuando Joan Laporta recurrió a Guardiola para rearmar el derrumbado equipo de Frank Rijkaard, el de Santpedor no dudó en llevarse consigo a Vilanova. Ahora el Futbol Club Barcelona y el deporte español se despiden de Tito. Un hombre que se convirtió en el espíritu del mejor Barca de la historia.
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