El Barcelona certificó su pase a los cuartos de final de la Liga de Campeones al vencer al Manchester City (2-1) ayer miércoles en el Camp Nou, en un encuentro abierto, pero donde la clasificación de los catalanes no peligró gracias a su victoria 2-0 en la ida en Inglaterra. En un partido muy competido, el Barça logró la victoria en la vuelta de octavos con un gol de Dani Alves en el descuento (90+1) pocos minutos después de que el central belga del City Vincent Kompany (89) igualara provisionalmente el tanto inicial del astro argentino Leo Messi (67).
Muy cuestionado por la imagen ofrecida en la derrota contra el Valladolid en la Liga española el sábado, el Barça saltó muy intenso al terreno de juego y recuperó el juego combinativo con Andrés Iniesta desequilibrando entre líneas y Messi muy participativo e incisivo en los últimos metros. "Tuvimos tropiezos muy graves, sobre todo en la manera de jugar, la imagen que dejamos.
Hoy volvimos a ser el Barcelona que nosotros queremos y que la gente espera", afirmó el delantero argentino en declaraciones a la televisión Canal Plus. "Más allá de que el gol llegó en el segundo tiempo, creo que la eliminatoria nunca peligró. Controlamos muy bien todo el partido", añadió. Los catalanes dispusieron de varias ocasiones claras en el primer tiempo, especialmente a través de Neymar, a quien anularon un gol por un dudoso fuera de juego de Jordi Alba, que lo había asistido desde la izquierda (17).
A partir de aquí, el City adelantó la presión y plantó cara en el centro del campo, especialmente a través de David Silva y Yaya Touré que, sin embargo, no podían conectar con un desaparecido Sergio Agüero, con unas molestias en la pierna izquierda que lo obligaron a ceder su puesto al bosnio Edin Dzeko en el descanso.
El partido enloqueció en los instantes finales del primer tiempo, donde ambos partidos dispusieron de claras ocasiones para desequilibrar el marcador. Neymar, tras dejar sentado a su marcador con un ligero toque de cabeza, disparó rozando el palo, y unos segundos después, Xavi estrelló en Joe Hart un disparo peligroso tras un pase de Messi desde la izquierda (39). El City respondió con una rápida conexión entre Touré y Silva, quien la dejó de talón para que rematara el francés Samir Nasri, muy centrado (41).
Antes del silbido del árbitro, aún pudo marcar Neymar tras una nueva diablura de Messi, pero el brasileño Fernandinho la sacó de cabeza bajo palos. Tras la reanudación, el Manchester City, que no renunció en ningún momento al partido, saltó mucho más intenso tratando de anotar el gol que los colocara en la eliminatoria. El recién ingresado Dzeko hizo lucir a Víctor Valdés con un cabezazo a la escuadra (52) y el argentino Pablo Zabaleta, solo en el segundo palo, desaprovechó una clara ocasión al cruzar demasiado el balón (55). "Ese fue el peor momento. Ahí nos tomó el dominio del juego el City y fue donde nos crearon dos ocasiones de gol.
Pero es poco probable que ante equipos de la magnitud del City se pueda tener un control absoluto los 90 minutos", señaló el técnico argentino Gerardo Martino. Ante el vendaval inglés, solo Messi parecía capaz de devolver la calma a los azulgrana. Cuando peor lo pasaba el Barça, el astro argentino Leo Messi, que ya había avisado con un balón al poste tras arrancar desde la derecha (50), aprovechó un mal rechace de Joleon Lescott para elevar el balón por encima de Hart y colocar el primer gol en el marcador (67).
Los ingleses, que se quedaron con diez tras la expulsión de Zabaleta (78), solo consiguieron empatar tras un córner rematado por Dzeko, que había sustituido a un desaparecido Agüero, y enviado al fondo de la red por Kompany. Pero la alegría duró poco a los ingleses que vieron cómo Alves volvía a poner en ventaja al Barça en el tiempo añadido aprovechando un balón despejado en el área (90+1).
Por Daniel Bosque | AFP