Cristiano Ronaldo firmó una exhibición en el Friends Arena y con un "hat-trick" en la segunda parte selló el billete a la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™ de forma incontestable y dejó a la Suecia de Ibrahimovic en el camino.
Portugal hizo valer de nuevo su superioridad y ganó a una Suecia que dejó gran parte de sus opciones en la primera parte en Lisboa, en la que pudo haber marcado con 0-0.
Suecia pareció salir mejor, presionando arriba para tratar de robar, pero pronto Portugal asumió el mando, mostrando las limitaciones locales en ataque y llegando cada vez con más peligro. Avisó a los quince minutos Alves en un cabezazo a balón parado tras ganarle la disputa a Ibrahimovic y que Isaksson desvió.
Pero fue en el último cuarto de hora cuando más peligro llevó el equipo luso, con Ronaldo muy activo. El "7" rozó el gol en varias ocasiones, de cabeza y con el pie. Almeida, que salió de inicio por Postiga para tener más poderío arriba, también tuvo un testarazo franco, que erró en el segundo palo.
Por la ansiada clasificación
Oportunidades aparte, Portugal se encontraba mejor y tenía todo bajo control en medio de un encuentro muy físico, con mucha disputa. A Suecia le costó llegar al área. Ibrahimovic, errático en ese período, tenía que bajar a veces al medio para recibir.
El pase fue de "Ibra", que apenas dejó ese detalle y una volea imposible antes del descanso. La garra del capitán sueco, que le robó la cartera a Veloso en la línea de fondo, dejó a Larsson enfrente de Rui Patricio en el arranque de la segunda parte, pero se durmió y su remate lo sacó el portero luso.
Del posible 1-0 al 0-1 en un par de minutos. Moutinho, de lo mejor de Portugal, filtró un gran pase en carrera a Ronaldo, que se plantó solo y definió a la perfección, un gol que cantó con mucha rabia, consciente de que casi valía un billete a Brasil 2014.
Suecia pareció quedarse sin respuesta. Tres goles en cuarenta minutos eran muchos, aunque quedara toda la segunda parte. Portugal, que había perdido por lesión a Coentrao, mandaba con suficiencia.
Pero Ibrahimovic, hasta entonces discreto, empezó a brillar en el partido. Y de qué manera, con dos goles en cuatro minutos. Primero, le ganó por arriba a un hasta entonces imperial Alves en un córner. Luego mandó un zapatazo de falta a la red.
De repente, Suecia se fue con todo arriba. Demasiado riesgo contra un equipo que tiene a Ronaldo, imparable en el contraataque y que volvió a fusilar a Isaksson a la siguiente que tuvo, como más le gusta, en carrera, lanzado por Almeida. Y por si quedaba alguna duda, volvió a ganar por velocidad a la zaga sueca, a pase de nuevo de un sobresaliente Moutinho, para sentar a Isaksson y marcar casi sin ángulo. (EFE)