Los autos deportivos son una pasión. Y si encima su producción se redujo a unos pocos, aún más. Y ese es el caso del Ferrari 250 GTO que se convirtió en el auto más caro del mundo al ser adquirido por un comprador desconocido en 52 millones de dólares.
Según el diario británico The Telegraph, que se hizo eco de la historia que contó el estadounidense Bloomberg News, el vendedor del auto fue Paul Pappalardo, quien en 1974 llevó una de las 36 Ferrari 250 GTO a Connecticut, donde vive actualmente y a donde llegó este comprador impulsado por sus millones y por sus deseos de contar con uno de los autos más bellos del planeta.
Con los 52 millones de dólares, Pappalardo superó el récord del anterior Ferrari 250 GTO, que era de 35 millones. Nada mal si se tiene en cuenta que su antiguo dueño gastó en comprarlo menos de seis mil dolares y que en la página oficial de Ferrari está cotizado apenas por encima de los 20 millones.
Un auto con historia. El Ferrari 250 GTO fue creado para correr en las carreras de “Gran Turismo Omologata” (Gran Turismo Homologado) entre 1962 y 1964. Y tenía dos características que lo destacaban por sobre el resto: un peso bajísimo para la época (880 kilos) y su agilidad superior. (Clarin)