Broomfield, Colorado, EE.UU.- Ruslan Provodnikov desgastó a Mike Alvarado toda la noche con un golpe tras otro hasta que Alvarado no pudo responder al llamado del undécimo asalto.
El ruso apodado el "Rocky siberiano" sorprendió a Alvarado para apoderarse del título de peso superligero ayer sábado. Provodnikov (23-2) derribó a su rival dos veces en el octavo episodio con una serie de golpes cerca de las cuerdas y terminó con un exhausto Alvarado (34-2) al final del décimo.
El combate fue detenido por el réferi Tony Weeks, que le preguntó al boxeador perdedor varias veces si deseaba continuar y este respondió que no.
Esta pelea contrastó con la victoria de Alvarado sobre Ríos hace siete meses, cuando mostró un boxeo impecable.
"No fue la noche de Mike. Estuvo muy defensivo", dijo Shann Vilhauer, entrenador de Alvarado. El promotor Bob Arum, que representa a Alvarado, dijo que su boxeador parecía haber sufrido una conmoción cerebral. Ni siquiera el apoyo del público pudo levantar a Alvarado, que creció en Denver.
"Mi equipo me dijo, "estás listo, sal y conviértete en campeón'', dijo Provodnikov quien no contó con su entrenador Freddie Roach en su esquina. Roach sigue en las Filipinas para entrenar a Manny Pacquiao, que enfrentará a Brandon Ríos el mes próximo en Macau.
Por Pat Graham (AP)