El tratamiento médico que requerirá el delantero del Miami Heat, Michael Beasley, después del juego de pretemporada contra Detroit Pistons no fue por un golpe inducido por el propio jugador, así lo indicó el equipo.
Beasley require tratamiento para reducir la inflamación por encima de su ojo, luego de que en el partido del jueves contra Detroit, reportes iniciales mencionaban la causa por la que él se golpeó la cara debido a la frustración por los errores cometidos en la cancha.
Beasley dijo el viernes que se golpeó mientras corría por la cancha durante el tercer periodo de la victoria. Pero Beasley, el entrenador del Heat, Erik Spoelstra y los miembros del equipo dijeron que la herida sobre el ojo derecho de Beasley fue el resultado de un golpe accidental con el alero de los Pistons, Jonas Jerebko cuando intentaba bloquear un tiro en el tercer cuarto, no de un golpe que él mismo se dio.
"He visto el vídeo, y es como si yo me golpeara a mismo", dijo Beasley antes del partido de pretemporada del viernes contra los Charlotte Bobcats en el Sprint Center. "He tenido a todo el mundo llamando y preguntando, '¿Por qué estás tan loco?'".
Beasley finalizó con nueve puntos el jueves en su primera aparición en la pretemporada desde que se reincorporó con el Heat este verano con un contrato no garantizado, estuvo de vuelta para el juego del viernes en la noche, anotando 13 puntos en 19 minutos.
Miami no contó con su guardia Dwyane Wade, quien decidió permanecer sentado y darle descanso a su rodilla por segunda noche consecutiva. El Heat originalmente tomó a Beasley en una segunda ronda del draft de 2008 con Kansas State, pero fue cambiado dos temporadas después cuando el Heat negoció los salarios de LeBron James y Chris Bosh para que se unieran a Miami junto a Wade.
Beasley después tuvo tres desafortunadas campañas en Minnesota y Phoneix antes de que fuera puesto en libertad por los Suns en agosto después de algunos problemas dentro y fuera de la duela. Beasley dijo el viernes que no tiene por qué causar ninguna distracción o atraer la atención negativa hacía sí mismo en esta segunda oportunidad con Miami.
"Vengo de en una situación delicada", dijo Beasley. "No es presión, pero hay que pensar un poco más. No quiero ser la razón por que la nave se hunda. Definitivamente lo estoy tomando más en serio que en mis primeros dos años".
Por Michael Wallace ESPNDeportes.com