Tan estético como inconfundible, al maillot arcoíris que reconoce al Campeón del Mundo del ciclismo le acompaña. Pero junto a la gloria del título mundial, de la mano, el peligro de caer en esa maldición que frena trayectorias, atrae lesiones, problemas físicos e infortunios de mayor calado.
Philippe Gilbert, actual arcoíris, ha sido el último en ser relacionado con la maldición. Dominador de las clásicas en cursos pasados (sobre todo en 2011, recuerden: Eroica, Flecha Brabançona, Amstel, Flecha Valona, Lieja-Bastoña-Lieja, San Sebastiá), siempre protagonista en estas pruebas, en 2013 permanecía con el palmarés blanco. Ni un éxito. Apenas un podio en los nacionales de Bélgica.
En esta Vuelta, incluso, acabó segundo en la etapa con final en Mairena del Aljarafe por detrás del checho Stybar. Hasta este jueves.
En Tarragona, meta de la duodécima etapa de la carrera, el belga Gilbert, estrenó su palmarés de 2013 con un acelerón en el momento final que le valió para destacarse del pelotón y su anárquica gestión del sprint y alcanzar al noruego Edvald Boasson Hagen (Sky), quien se había destacado en cabeza a menos de 500 metros gracias al trabajo del colombiano Rigoberto Uran.
La aparición del corredor del BMC, cinco victorias entre todas sus participaciones en la Vuelta de momento, fue el gran chispazo, pero no el único, de una jornada hasta cierto punto plácida para los grandes protagonistas de la carrera tras la que el italiano Vincenzo Nibali (Astaná) retuvo su liderato.
En Tarragona se rozó el sprint, pero entre Boasson Hagen y Gilbert lo reventaron. Antes, porque las fugas se dan por supuestas, los protagonistas fueron los franceses Cedric Pineau (FDJ) y Romain Zingle (Cofidis) y el uruguayo Fabricio Ferrari (Caja Rural). El trío atacó prácticamente tras pasar bajo la pancarta de kilómetro cero, llegó a contar con una ventaja máxima de seis minutos y medio y fue neutralizado dentro de los últimos veinte kilómetros.
A esas alturas de etapa un pelotón de mando cambiante aceleraba su velocidad, aunque el alemán Toni Martin (QuickStep) probaba suerte en solitario y en un sprint intermedio el italiano Ivan Basso (Cannondale), séptimo en la general, y el irlandés Nicolas Roche (Saxo-Tinkoff) se involucraban hasta el punto de pescar tres y dos segundos de bonificación, respectivamente, que les acercan tímidamente al liderato de Vincenzo Nibali.
Para este viernes la carrera propone 169 kilómetros entre Tarragona y Castelldefels que incluyen, aunque lejos de la meta, el exigente paso por el Rat Penat y sus numerosas rampas por encima del 14 %. Y los Pirineos en el horizonte inmediato.
Etapa 12: Maella-Tarragona, 164,2 kilómetros
.1. Philippe Gilbert (BEL/BMC) 4h.03:44
.2. Edvald Boasson Hagen (NOR/Sky) m.t.
.3. Maximiliano Ariel Richeze (ARG/Lampre) m.t.
.4. Luca Paolini (ITA/Kathusa) m.t.
.5. Gianni Meersman (BEL/Omega Pharma) m.t.
.6. Francesco Lasca (ITA/Caja Rural) m.t.
.7. Steve Chainel (FRA/AG2R) m.t.
.8. Reinard Janse Van Rensburg (RSA/Argos) m.t.
.9. Anthony Roux (FRA/FDJ) m.t.
.10. Zakkari Dempster (AUS/Netapp-Endura) m.t.
Clasificación general
.1. Vincenzo Nibali (ITA/Astaná) 45h.26:06
.2. Nicolas Roche (IRL/Saxo-Tinkoff) a 31
.3. Alejandro Valverde (ESP/Movistar) a 46
.4. Christopher Horner (USA/RadioShack) m.t.
.5. Joaquim Rodríguez (ESP/Katusha) a 2:33
.6. Domenico Pozzovivo (ITA/AG2R) a 2:44
.7. Ivan Basso (ITA/Cannondale) a 2:52
.8. Thibaut Pinot (FRA/FDJ) a 3:35
.9. Rafal Majka (POL/Saxo-Tinkoff) a 3:46
10. Daniel Moreno (ESP/Katusha) a 3:56
(20minutos.es)