El escándalo del "Pool Gate" llegó hasta la capital de EEUU el viernes cuando el senador de Arizona John McCain emitió unas fuertes declaraciones en contra de la celebración de los Dodgers de Los Angeles por su banderín de la División Oeste de la Liga Nacional.
Luego que los Dodgers aseguraran el campeonato divisional gracias a su victoria de ayer siete carreras por seis sobre los Arizona Diamondbacks, casi la mitad del equipo celebró el logro lanzándose a la piscina ubicada detrás de la pared del jardín derecho en el Chase Field.
El evento molestó a muchos peloteros, ejecutivos y fanáticos de los Diamondbacks, incluyendo a McCain, quien publicó este mensaje en la red social Twitter:
John McCain ✔ @SenJohnMcCain No-class act by a bunch of overpaid, immature, arrogant, spoiled brats! "The #Dodgers are idiots" azcentral.com/insiders/danbickley/2013/09/19/the-dodgers-are-idiots/ … 1:36 PM – 20 Sep 2013
The Dodgers are idiots Not to paint with broad strokes, but the Dodgers are idiots. Yasiel Puig thought it OK to blow off a Diamondbacks legend in his own ballpark, and everyone in Dodger Blue covered for him. A handful of… azcentral @azcentral
McCain incluyó un enlace a una columna del diario Arizona Republic titulada, "Los Dodgers son idiotas".
El presidente y Principal Oficial Ejecutivo de los Diamondbacks Derrick Hall publicó un comunicado en el Arizona Republic en el que afirmó, "Puedo tildar esto como una falta de respeto y un acto sin clase, pero ellos no tienen una piscina hermosa como esa en su viejo estadio y deben haber querido sentir lo que es tener una como esa".
Los Diamondbacks le habían pedido a los Dodgers que evitaran que sus jugadores volvieran al terreno una vez comenzara la celebración por el banderín. Luego del out final, los jugadores de Los Angeles chocaron manos y se reunieron por breves minutos en el terreno alrededor de la segunda base antes de volver al camerino, donde comenzaron a descorchar botellas de champaña y cerveza frente a las cámaras de TV.
Varios minutos más tarde, los jugadores salieron y corrieron hacia la piscina que está detrás de la cerca del jardín central y escalaron la pared. Su comportamiento fue reportado de forma extensa en videos de "SportsCenter" durante las transmisiones del viernes.
Los Dodgers malinterpretaron las intenciones de la petición de los Diamondbacks, de acuerdo con el presidente del equipo Stan Kasten. El pensó que se le estaba pidiendo a los jugadores de los Dodgers que no celebraran de forma ruidosa frente a los fanáticos de los Diamondbacks.
Para el momento en que los jugadores se metieron a la piscina, el estadio estaba casi vacío. "Nunca he estado en una celebración como esta, en la que no haya un poco de emoción y que sea un poco ruidosa", dijo Kasten.
El jugador del cuadro de los Diamondbacks Willie Bloomquist fue el crítico más vocal de la celebración en la piscina. "Pienso que fue algo bien fuera de lugar e irrespetuoso", dijo Bloomquist luego del partido. "Es ago sorprendente porque ellos tienen muchos jugadores veteranos en ese equipo y pensé que tenían más clase que eso".
Por Arash Markazi ESPNLosAngeles.com