Bud Selig anunció ayer que tiene planes de retirarse como comisionado de las Grandes Ligas en enero de 2015, después de más de 22 años en el puesto.
El período de Selig lo deja marcado por un fuerte aumento en los ingresos y la asistencia a los estadios, la cancelación de una Serie Mundial y el escándalo por dopaje. El comisionado, de 79 años, dijo en 2003 que se retiraría en 2006, pero ha aceptado nuevos contratos repetidas veces.
Algunos propietarios de equipos, e incluso su esposa, se han mostrado escépticos ante las afirmaciones de que realmente lo haría, pero esta es la primera ocasión en que emite una declaración formal en la que dice que planea retirarse del puesto más importante de este deporte.
“Durante lo que resta de mi período espero continuar este extraordinario crecimiento y atender varios asuntos significativos”, afirmó.
Selig dijo que pronto anunciará un plan de transición que incluirá una reorganización de la plana mayor del béisbol. Indicó que dejará el puesto el 24 de enero de 2015, con lo cual el suyo sería el segundo período más largo de un comisionado del béisbol después del de Kenesaw Mountain Landis, que lo ejerció de noviembre de 1920 a noviembre de 1944.
El de Selig incluyó subdividir cada liga en tres divisiones en lugar de dos, agregar los boletos comodines a los playoffs y rondas adicionales en la postemporada, ampliar el número de equipos para que ingresaran Arizona y Tampa Bay, instituir la repetición instantánea, iniciar el Clásico Mundial de Béisbol, lanzar la red televisiva de las Grandes Ligas y centralizar los derechos digitales del deporte bajo el nombre MLB.com.
Selig presidía las Grandes Ligas durante una huelga de siete meses y medio en la temporada 1994-95 que llevó a la cancelación de la Serie Mundial por primera vez en 90 años, pero desde entonces el béisbol y sus jugadores han tenido paz laboral. (AP)